Saludos, fanáticos del DreadBall, y sed bienvenidos de nuevo a otro apasionante Domingo de DreadBall, donde podréis disfrutar de nueva información sobre el deporte más famoso de la galaxia.
Sigo avanzando en la traducción del reglamento, a mi ritmillo. Al final del artículo tienes un listado de los artículos anteriores relacionados con la traducción. Hoy os traigo un texto de ambientación aparecido en el libro de temporada 2 de la primera edición. Este texto fue traducido por putokender y atari_freak, y publicado en el libro de temporada 2, hace bastante tiempo.
Hoy en día casi todos los árbitros de DreadBall son robots. En los inicios los partidos eran monitorizados por Árbitros humanos, lo que llevó a todo tipo de triquiñuelas y tongos. Muchos partidos tuvieron que ser rejugados, e incluso invalidados totalmente, cuando los escándalos por soborno, chantaje y otro tipo de amenazas se hicieron públicas. En los inicios el DreadBall era famoso por su corrupción y sus partidos amañados. Los robots fueron la solución.
A todos los efectos, los Árbitros robot del DGB son incorruptibles. Es decir, incorruptibles por los equipos. Están programados con el último reglamento del DGB y tienen una conexión segura con el Ojo en el Cielo, lo que les da una visión ventajosa del partido.
Eliminadas las posibilidades de soborno y amenazas, los primero Árbitros Robot solo estaban sujetos a un método de persuasión: la fuerza. Muchos fueron destruidos en el campo como resultado de «accidentes», a menudo causados por la caída simultanea sobre ellos de varios Defensas con armaduras pesadas. Estos sucesos aparentemente inocentes, pero muy bien orquestados, llevarían a una escalada de violencia en los partidos, ya que tras retirar los restos del Árbitro los partidos continuaban sin monitorización. Los Árbitros actuales están equipados con lo último en armadura militar, con la excepción de las placas de gel balístico que llevan los equipos de robots. ¡Chocarse contra un Árbitro moderno duele! Esto ha reducido las incidencias de Árbitros dañados o destruidos a casi cero, y ahora los partidos pueden ser monitorizados al nivel que el Digby considera mejor para que los partidos sean entretenidos.
Hablando de monitorización, el DGB ha sido criticado por permitir las faltas. Los Árbitros robot tienen, literalmente, ojos en la nuca, por lo que seguramente podrían detectarlas y evitarlas, aunque el asunto es si esto haría los partidos más divertidos o no. Parece que el Digby cree que no.
Lo que pasa realmente es un secreto, pero la mayoría de aficionados tiene la sospecha de que el DGB programa algún tipo de punto ciego en los Árbitros, lo que te permite salirte con la tuya si eres afortunado. Esto añade tensión a los partidos y proporciona más tácticas sobre el campo, lo que es bueno para el juego, para los hinchas y para los patrocinadores.
Recuerda que si quieres saber más de este juego / deporte, puedes descargar el número 39 de la revista Cargad y leer un par de estupendos artículos sobre DreadBall. Asimismo puedes buscar la etiqueta domingos de dreadball (DdD) o DreadBall en el buscador (arriba a la derecha).
Saludos y DreadBall.
Partes traducidas y publicadas