Saludos, señores de la guerra.
El proyecto Ninth Age va avanzando a un ritmo constante y vigoroso, al tiempo que va creciendo (incluso más) la masa de aficionados al antiguo Warhammer que se aglutinan en torno a esta versión.
El testeo va dando sus frutos, y las versiones definitivas de las reglas ya están cerca. El aspecto estético también ha mejorado. ¿Habéis visto el nuevo logo?.
Tras el salto os resumo cómo va el proceso general, cuáles serán los próximos pasos, y qué conclusiones he sacado tras echar unas cuantas partidas. Por supuesto, siempre podéis visitar el sitio web oficial de Ninth Age, e investigarlo por vosotros mismos.
ESTADO ACTUAL
La versión más actual del Reglamento y el Libro de Magia es la 0.9.2. Las diversas listas de ejército están en versiones entre la 0.9.1 y la 0.9.3. La próxima revisión se espera para el día 8, y va a centrarse principalmente en las listas de ejército (lo básico poco va a cambiar ya).
El calendario «oficial» estima que para finales de enero tendremos la primera y flamante versión no-beta, que será la 1.0. A partir de entonces se apaciguará el ritmo de cambios sensiblemente: se pretende una única revisión anual.
EXPERIENCIA PERSONAL CON EL JUEGO
Todos los artículos que había escrito hasta ahora sobre Ninth Age estaban basados únicamente en «teoría». Os he contado mi opinión tras haber leído los documentos, y basándome en mi experiencia como jugador de Warhammer de toda la vida (he pasado por todas las ediciones desde Cuarta), habitual de torneos (tanto competitivos como de pachangueo). Ahora estoy escribiendo esta entrada con la ventaja de haber jugado unas cuantas partidas, y haber podido meterme de lleno en el nuevo entorno.
UN APUNTE: «LA REGLA MÁS IMPORTANTE»
Sin duda, una de las cosas que más se agradecen es la precisión técnica con la que están escritos todos los documentos. Un detalle muy importante: desde siempre, en cada reglamento de Warhammer, nos hemos econtrado lo que llamaban «la regla más importante», consistente en que «ningún reglamento puede cubir cada situación que pudiera suceder» y también decía que, en caso de que algo no estuviera claro, símplemente había que «tirar un dado para ver quién lleva razón», en vez de desperdiciar el tiempo discutiendo.
Desde el momento de escribir esta regla, los diseñadores estaban asumiendo su incapacidad para escribir un reglamento lo suficientemente preciso y robusto para un juego como Warhammer, escudándose en una supuesta «infinita variedad» de situaciones posibles.
Pero, ¿es cierto que un juego como Warhammer tiene posibilidades tan infinitas? Ciertamente no. No es TAN complicado. Todos hemos jugado algunas partidas a esto, y las situaciones complicadas son las mismas que se repiten una y otra vez.
A mi me parece que el problema era la excesiva complicación progresiva que se iba produciendo al tener un sistema de reglas desperdigado por más de una decena de libros. Cada vez que se diseñaba un nuevo libro, era inevitable entrar en conflicto con algo que ya hubiera antes, y no se tenía en cuenta. Luego también está la vaguedad en la descripción de ciertos procesos complicados, como las cargas y los movimientos.
¿Cómo hacer para cargar cuando hay terreno intransitable por en medio y no se puede «cerrar la puerta»? ¿Quién resuelve primero las habilidades simultáneas? ¿En qué orden se aplican los efectos que modifican el liderazgo? Todo esto siempre ha quedado en el limbo de «la regla más importante» en las anteriores ediciones…
Pero ya no: en Ninth Age no existe esa regla. Y no se echa en falta. Estamos ante el Warhammer mejor escrito, más claro, preciso y consistente que se haya diseñado jamás. Hay menos dudas y, para las que surgen, es más fácil encontrar la respuesta en el reglamento, gracias a lo bien ordenado que está. Y también se ha resumido mucho, al haber evitado repeticiones innecesarias de las mismas reglas.
Esto mejora mucho la experiencia de juego, ya que no hace falta detener demasiado la partida si hay una duda. Se para un momento, se encuentra el texto enseguida, se resuelve el conflicto, y se sigue adelante, sin tener que hacer la chapuza de tirar un dado para ver qué pasa. Ayuda mucho también que el formato digital permite buscar mucho más rápido las cosas en tu móvil o tablet. Ya veis, nuevos tiempos, nuevo juego.
EL JUEGO EN SÍ
Hablemos ahora de cambios de fondo, no sólo de forma.
Gran parte de las mejoras se basan en tres grandes cambios estructurales del sistema de juego:
- Se recupera la importancia de la carga por el flanco y la retaguardia (aunque no son tan extremadamente definitivas como eran en Séptima).
- Se limita el tamaño máximo de las unidades en las listas de ejército (y algunos tipos de tropa sufren bastante más limitación que otros).
- Se equilibra el poder de la caballeria, la infantería y los monstruos.
Las tácticas típicas (y a veces, desagradables) de Octava ya no son viables. No se pueden montar aquellas unidades tan grandes. La caballería, gracias a su movilidad, recupera su capacidad de anular la impasividad si carga por el flanco. La infantería ya no es tan vulnerable ante los monstruos (gracias a la nueva versión de la «parada»). Los monstruos ya se pueden incluir con un poco más de tranquilidad, gracias al nerfeo de los cañones y de algunos hechizos.
Hay, desde luego, muchos más cambios. Hay retoques en cada faceta del juego, y no voy a detallar aquí todos porque sería tedioso.
LAS LISTAS DE EJÉRCITO
Aunque podría decirse que, pese a todo, los mayores ajustes vienen a través de las listas de ejército. Todos los grupos de desarrollo han diseñado las listas basándose en tres premisas:
- Permitir el uso de cualquier miniatura que haya sido lanzada alguna vez para el juego.
- Que todas las opciones de la lista sean viables, y que no haya ninguna que se convierta en inclusión obligatoria.
- Que el nivel de poder general del ejército esté equilibrado con el de las demás listas.
El primer punto es el más sencillo. Únicamente se han dejado aparte los personajes especiales, por su particular complicación. No se sabe si están pensando en incluirlos más adelante, aunque siempre se puedes usar tu miniatura de Karl Franz como comandante imperial en Grifo, por ejemplo.
El segundo punto, el del «equilibrio interno», es algo más complicado, aunque creo que se está consiguiendo. Las versiones actuales de las listas tienen, indiscutiblemente, más equilibrio interno del que ha habido jamás en este juego. Probablemente aún no esté conseguido del todo, pero creo que es un objetivo posible.
El tercer punto es sin duda el hueso más duro, y ahí es donde encuentro las mayores carencias ahora mismo. Mi sensación es que sigue habiendo ejércitos que son claramente superiores a otros. Y no hablo sólo del efecto piedra-papel-tijera, que puede hacer que te de la sensación de que un ejército concreto tiene las de ganar contra otro concreto. Hablo de ejércitos que son claramente inferiores a los demás.
Debo decir, sin embargo, que la situación no es tan flagrante como en Octava, cuando todos los podios de torneos tenían al menos un Elfo Oscuro (y además con una lista prácticamente fotocopiada).
Este asunto del «equilibrio externo» es indiscutiblemente el más difícil de conseguir. En un grupo de jugadores de Bretonia, por ejemplo, es fácil llegar a un acuerdo para equilibrar los Griales con los demás caballeros para que todos tengan su gracia, pero junta a ese grupo con otro de jugadores de Hombres Lagarto, y verás que llegar a decisiones consensuadas no siempre es tan facil. Se necesita mucho más tiempo, y los cambios son bastante más difíciles de testear.
REFLEXIONES FINALES
Desde el abandono de Warhammer, han surgido no pocas versiones de reglamentos lanzados por unos u otros grupos de aficionados. Todos estas versiones han sido fruto de la pasión desinteresada de jugadores que se han pegado el curro de realizar un trabajo tan complejo como este, y lo han puesto a disposición de los demás, lo cual merece «mis dieses» más sinceros.
Sin embargo, hasta donde yo sé, el grupo de desarrollo más amplio y mejor organizado es el de Ninth Age. Y además está lleno de gente que ha jugado cientos de partidas (que se dice pronto) y saben de esto mucho, pero mucho más, que los diseñares originales de GW.
Colaborar con el grupo es muy sencillo: sólo tienes que darte de alta en el foro, entrar en cualquier hilo, y aportar tus sugerencias. Desde erratas detectadas, nuevas ideas, aportaciones… todo es bienvenido. Incluso puedes entrar en un grupo de testeo (aunque para eso hay que meterse un poco más).
Esta Novena incorpora elementos de Octava, y también de Séptima y Sexta, al tiempo que también incluye cosas nuevas. El resultado es un juego que está mejor que nunca, que no va parar de mejorar. Es lo que siempre habíamos pedido a Games Workshop que hiciera… ¡y la solución estaba en nuestras propias manos!
El día 6 voy a un torneo por equipos bastante grandecillo en Granada. Me presentaré con una lista de Demonios de Podredumbre que creo que puede dar mucha guerra. Espero que la experiencia sea positiva, y os contaré las conclusiones que saque aquí.
¡Permaneced atentos a Cargad!
Te hago un par de preguntas ahora que has jugado:
1ª: A parte del cierto desequilibrio que sigue existiendo en las listas de ejército (y que como dices, siguen corrigiendo), ¿que otras cosas hay actualmente en 9th Age que no te gusten?
2ª: Como sabrás, yo DETESTO 8ª ed y para mí la mejor es 7ª si le quitamos la desmesurada potencia de las caballerías. Además, no me gusta nada la gran importancia que ganó la aleatoriedad en 8ª frente a 6ª-7ª. La pregunta sería: ¿Crees que esta «nueva edición» podría gustarle a un jugador como yo?
Un saludo
@ilore: Pues en general me parece que ha quedado todo muy bien. Personalmente, no me gusta la supresión de la fuerza irresistible, aunque es algo que a la mayoría le parece bien.
¿Puede gustarte esta edición si aborreces Octava y te encanta Séptima? Pues depende de lo que te gustara de Séptima y de lo que aborrecieras de Octava.
Si lo que no te gustaba de Octava era medir las distancias siempre, quitar poder a las caballerías, quitar poder a los ejércitos MSU, retirar las bajas de atras, etc, estas cosas siguen ahí, así que no te va a gustar Novena tampoco.
Si crees que lo que fallaba de Octava era que el juego de flancos y retaguardia perdía muchísimo peso, y que las unidades muy grandes de infantería de élite eran demasiado poderosas, entonces sí te va a gustar Novena.
Mi consejo es que pruebes esta nueva edición con la «mente limpia», y abierto a creer que puede estar mejor que tu querida Séptima. Pero claro, cada uno juega a lo que le apetezca…
Un último comentario: no estoy de acuerdo en que Octava era más aleatoria que Séptima. Y si lo fuera, tampoco es problema de este juego. Warhammer tiene azar, así es y así debe ser. Si no te gusta el azar, no te debería gustar warhammer.
Sobre el papel me han gustado bastante tanto lo altos elfos (aunque tienen que revisar lanceros, arqueros y los caballeros dragón), elfos oscuros y los skaven por que te da opción de usar lo que quieras sin ser basura, pero me dejan descontento los enanos:
– rompehierros a la estanteria
– magia sin bonificadores
– maquinas nerfeadas ; singulares y que comparten tipo, ejemplo hasta 1500 solo puedes usar o 1 cañon o una catapulta ( en cambio los pieles verdes 2 catapultas…)
– Infantería monstruosa que te deja con mal sabor de boca, caros y que solo van bien contra un par de unidades.
… por lo menos han arreglado los matadores…
Buenas,
Siempre e sido seguidor de warhammer y nunca he comentado nada.
Estoi siguiendo todo el suicido de gw con AoS y me desespera bastante.
Pero ver como la comunidad esta avanza con el 9age me motiva muchisimo. Mi grupo de jugadores hemos empezado con 9age y nos gusta mucho. Espero que paginas como la vuestra aposteis por ellos, pq es el principio de dar un portazo a las locuras de gw y poder disfrutar del hobby con normalidad.
Muchas gracias i seguid asi.
PD.: La listas de HL de 9age mu gustan mucho. Solo falta poder poner Mazdamundi.
Hola Dragus: Me parece genial lo que escribes y te tengo una pregunta basada el lo que nos dices:
«Permitir el uso de cualquier miniatura que haya sido lanzada alguna vez para el juego.
Que todas las opciones de la lista sean viables, y que no haya ninguna que se convierta en inclusión obligatoria».
Teniendo en cuenta lo anterior, ¿Sabes si tienen pensado un ejército de mercenarios? Pues vaya que miniaturas sí existieron pero no veo ese libro por ningún lado.
Gracias de antemano por tu respuesta.
@lughpendragon: De momento no hay nada previsto de Mercenarios. Ni siquiera había reparado en ello… Intentaré enterarme de algo más.
Me alegro mucho, espero que la comunidad lo reciba bien. Por mi parte, seguiré jugando en sexta, me gustó demasiado poco poder medir en todo momento en octava 🙂
Respondiendo a la pregunta sobre mercenarios. En primer lugar el equipo completo de 9th quiere centrar sus esfuerzos en conseguir equilibrar los ejércitos entre sí de la mejor forma posible. Una vez consideren que este equilibrio interno ha sido alcanzado (para el cual aún queda algo de tiempo pues lo libros actuales no tienen ni dos meses) se han planteado la inclusión de nuevos ejércitos y facciones.
Por prioridad el primero de ellos será Mercenarios. No sólo por la gran demanda de peticiones, sino también por rescatar del olvido otro gran ejército abandonado por Gw al igual que los tapones del caos. Por lo que se en el equipo de 9th hay un miembro que a su vez forma parte de una página (creo que italiana) que diseñó y actualizó el libro de Mercenarios llegando a pedir consejo y aprobación al Cavatore.
Por si os interesan también han habido peticiones para la inclusión de Estalia, Kislev, Ind, Nippon/Catay , Arabia y yo mismo aporté a los Fimires al saco (esos pobre olvidados).
@Borja Garcia Adalid: Te otorgo oficialmente el Premio Cargad a la Mejor Respuesta del Post 😉
Pese al titulo he estado leyendo un poco el tema, pero me ha irritado mucho los ojos menciones continuas de «ninth age». ¿Tanto cuesta poner novena era? . Así que ha he dejado de leer. Buenos días.
@Mordregon: No es que cueste, pero por algun motivo los nombres de los juegos suelen dejarse en ingles. No he visto que hagas comentarios de queja por Martillo de Guerra, o Manuscritos de Nuth Recargados, o Reyes de la Guerra, o tantos otros. Y si con eso ya es suficiente para eliminar tu interés, quizá no estabas realmente interesado en primera instancia. Buenas noches.
Me ha encantado lo que estoy leyendo.
El único inconveniente que veo es tenerlo que «medir» todo. Calcular a ojo también forma parte de la estrategia del general.
Pero vamos, por lo demás bien.
Al menos en lo que se refiere en juego seguirá vivo.
Lastima que no se hagan más libros, en fin, aun sigo sin entender en que coño estaban pensando los de GW al matar Warhammer.
Ojalá hubiera libros representativos para ello. Mola mucho tener una colección de libros, yo tengo todos los de sexta, séptima, y algunos de octava y quinta.
Un saludo y adelante.