Saludos señores de la Guerra.
Hoy, para variar un pelín, no voy a hablar de reglas ni novedades. Os voy a contar una historia. La historia de Fredrik de Brandengrado, rey de Riismark.
Fredrik de Brandengrado es una de las figuras más importantes de la época contemporánea de Conquest: son sus acciones las que han causado el inicio de buena parte de los conflictos actuales; él es una de las principales fuentes de conflicto dentro de los 100 Reinos. Es una historia de traición y pérdida, de crueldad y conflicto… pero de promesas para el futuro y esperanzas.
Escribir acerca de trasfondo es algo que requiere dedicación. Así que, lo que pienso hacer es que mis entradas coincidan con los hitos narrativos que le han rodeado. De esta forma que cada entrada sea auto-suficiente.
A modo de adenda, también os comentaré la bibliografía que se ha utilizado en este artículo, toda ella online y a vuestra disposición.
Lo ideal es que toda historia se remonte al principio… pero creo que hay que dar incluso un paso más atrás y dedicar el grueso de esta primera entrada a hablar de su patria: Riismark, una llanura fluvial con muchos ríos.
El origen exacto de Riismark es una fuente de debate entre los 100 reinos y los nativos de esta tierra cubierta de rios. A ojos foráneos, estriba del Rus, la tierra al este de los 100 reinos. Los Marqueños, como éllos se llaman, creen que se llama tierra de Ríos, en honor al legendario rey unificador y sus once herederos. Ambos se equivocan en un punto u otro: Los Marqueños son una rama de una de las distintas culturas que integran el núcleo de los 100 reinos, los Hemmanicos, quienes emigraron a Riismark cinco siglos antes de los eventos actuales y acuñaron el nombre originario de esta tierra: la Reiskong, o tierra del arroz.
Este grano se convirtió en algo fundamental para el sustento de la vida en Riismark. Permitió el desarrollo de los primeros atisbos de civilización tras el quasi-apocalipsis de la Caída. Pero lo que marcó un punto de inflexión fue el descubrimiento de vetas de hierro de calidad legendaria. Se erigieron grandes forjas y se alzó mucha infraestructura para asegurar y controlar el tráfico por estos canales. Los reyes del arroz erigieron para sí 11 tronos de acero, en honor a la leyenda de su génesis.
Esta nueva riqueza atrajo la codiciosa mirada de las grandes potencias: al este, los Principados del Rus; al oeste, el joven Imperio Armatellum. Inicialmente, estos poderes regionales creían que ganar control de esta región rica en recursos sería fácil, pero los 11 tronos de acero formaron un frente común y lucharon por mantener su independencia. Cuando la diplomacia falló, las fuerzas del Rus empezaron a prepararse para una contienda que, si bien hubiera sido larga y costosa, hubiera terminado en su victoria. Los Marqueños, que no estaban ciegos a esa triste realidad, decidieron hincar la rodilla ante el Emperador Carlos II de los Armatellum: a cambio de su servicio y de hierro a coste reducido, Riismark seguiría siendo una única provincia.
Así, podemos hablar del entorno de Fredrik: Riismark es una tierra vinculada a los 100 reinos, pero con sus diferencias y conflictos propios. De esta manera, cuando los Armatellum fueron asesinados, y su imperio se descompuso en una plétora de feudos atados por los últimos Vestigios Imperiales, Riismark sobrevivió. Ahora bien, los 11 tronos, si bién hermanados por leyendas ancestrales, suelen estar en guerra unos con los otros. Esto cambiaría en cierta manera con la ascendencia de uno de los 11 reinos: Brandengrado.
El bisabuelo de Fredrik era un hombre de gran saber, astucia y fuerza. Era un rey competente que, a lo largo de su reino urdió una red de influencias sobre los otros 10 tronos de acero. Su influencia fue armonizadora y Brandengrado, a resultas de su buen talante, prosperó. Solo había una sombra en su augusto reinado: una torre oscura, Nepenthe, morada de un hechicero llamado el Alquimista.
Todos los hombres estan destinados a morir, y la hora del buen Rey se acercaba. A sabiendas de este hecho, el Alquimista se presentó ante el Monarca, ofreciéndole una Panacea. Cuando le inquirieron el precio, él se limitó a decir que cada año vendría y que su precio era modesto, puesto que ofrecía la eternidad.
Los años pasaron, el bisabuelo permanecía en el trono, en salud inmejorable, cuando su hijo alcanzó la mayoría de edad. El alquimista lleva mucho tiempo saqueando las minas y los campos cuando el padre de Fredrik se convirtió en un hombre adulto y su abuelo envejecía. Pero el viejo Rey seguía en su trono, cada vez más distante de los males del reino. Las relaciones entre las distintas generaciones del linaje real se deterioraron progresivamente: el abuelo de Fredrik se había convertido en un hombre amargado e irascible, mientras que su padre, Willem, había hallado solaz en la fe e ignoraba a su primogénito, que ya de joven pecaba con sus vicios, en pos del hermano pequeño de Fredrik, Villemfred.
A los seis años, Willem envió a su primogénito a Pravia, donde sería formado en las instituciones de su Universidad. En su adolescencia, demostró ser un gran estudiante pero un mayor vividor, agravando la brecha con su padre. No obstante, su bisabuelo sabía que había potencial para templar con disciplina, así que lo envió a la Academia Proellia de Argem, la más ilustre de las instituciones del Imperio, que había sobrevivido la fragmentación que acaeció la purga de los Armatellum. No llegó a graduarse, pocos lo hacen, pero aprendió tácticas, esgrima y diplomacia.
A los diecisiete años abandonó la Academia Proellia, se convirtió en escudero y ganó sus espuelas de caballero: era hora de volver a casa.
La reunión no fue halagüeña: su abuelo y su madre habían muerto, su bisabuelo seguía en el trono, y los susurros y rumores acerca de la aberrante longevidad del monarca crecían con cada día. Pero había muchas labores que hacer: el Monarca envió a Fredrik a lo largo y ancho de Brandengrado, reavivando alianzas marchitadas con el resto de Tronos y solventando los problemas de los siervos. Era un líder con maña en la guerra y la diplomacia, justo y considerado, si bien con mal carácter de tanto en tanto.
Dos años después, el bisabuelo de Fredrik murió. No se sabe el cómo, surgiendo rumores de complots y actos de seres monstruososLos rumores se convirtieron en gritos y acusaciones de brujería, hasta que el nuevo rey, Willem I, anunció su devoción a la Fe con la llegada de un nuevo Obispo y la construcción de una nueva Catedral. Durante estos primeros días, las relaciones entre padre e hijo siguieron deteriorándose, pero la herencia del joven principe nunca estuvo en duda. Un modus vivendi surgió entre el monarca y su heredero.
Fue entonces cuando el Alquimista se presentó ante Willem I. Willem, iracundo ante la presencia y demandas de esa abominación, ordenó al Alquimista que se marchara. Pero había un gran problema: al Gran Rey de Brandengrado se le había ofrecido la eternidad, y ese regalo sería cobrado a lo largo de toda la eternidad. Con o sín rey, a Nepenthe no se le iba a negar su rédito… aunque hubiera que tomarlo a la fuerza.
Bibliografía:
- https://www.para-bellum.com/riismark/
- https://www.para-bellum.com/character-portrait-king-fredrik-of-brandengrad/
- https://www.youtube.com/watch?v=M5NwVJT6s7U&t=82s
- https://www.para-bellum.com/short-story-nepenthe-deliberations/
Muy interesante la historia de Riismark, deseando ver cómo sigue.
Esto seguro que acaba mal de-Nepenthe xD
Eso es lo que divierte, el trasfondo y las imágenes. A ver cuando llegue el libro de rol que nos encontramos.
Hombre, la historia, evidentemente va a tomar un giro brusco para los pobres humanos, no sería divertido si todo fuera felicidad, ha ha ha.
Respecto al libro del módulo de DnD, le tengo ganas. Que sea DnD me deja frio, porque no soy muy fan de ese sistema, pero a su vez entiendo la maniobra, porque con eso llegas a más gente.
Veo que en la entrada acerca de Riismark como tal no mencionas la división étnica que ha ido surgiendo entre los Riereños y los Marquenses. Que se que no es del todo necesario, pero tengo que decir que me gusta el detallito. Creo que eso de las discusiones acerca del origen de un grupo es algo que el género de fantasía debería hacer mas, es interesante
@Vardak. En efecto, esa información falta. Así como, por ejemplo, el hecho que el control intenso que los reyes de Riismark mantienen sobre el tráfico de mena de hierro hace que esta se encarezca. El efecto, no obstante, se aguant de todos modos, porque el acero es de tal calidad, que los reyes foráneos están dispuestos a pagar ese dinero.
Verdaderamente, se me hizo un pelín dificil hacer el balance. A fin de cuentas, las entradas son para un personaje, si bién se necesita cubrir la información del entorno subyacente!
De todos modos, cuando hagas las próximas dos entradas acerca de Fredrik, pienso o bien meterme con otros personajes o con los reinos como tal. Tengo que mirar que escribió @VBS, porque de esas entradas de 2020 no me acuerdo qué se cubrió.