Saludos, Señores de la Guerra.
En los lejanos años 80 hubo varias películas de ciencia ficción «adolescente» (o infantil) con grandes toques de humor. Cortocircuito es quizá el ejemplo más famoso, pero otra de las que tuvo bastante éxito en su día fue El Chip Prodigioso.
La película va de un experimento del gobierno (americano, por supuesto) en el que miniaturizan un submarino tripulado (por Dennis Quaid). El submarino, que debería haberse inyectado en un conejo para hacer pruebas, va a parar al cuerpo de Martin Short, un desgraciado cajero de supermercado que lo último que necesita es el estrés de verse perseguido por espías industriales.
La película no es del todo original, sino que está inspirada en el clásico de los ’60 Viaje alucinante (Fantastic voyage). La diferencia es que Viaje alucinante tenía tintes políticos (rusos vs americanos) mientras que esta película es más ligera, como muchas de las comedias juveniles de Joe Dante (Gremlins, Exploradores). Pasa bien (pese al histrionismo de Short), se deja ver, tiene buen ritmo y la actuación es en general correcta. Sin embargo, debo decir que esta película rebosa «ochenterismo» por todos lados, desde la estética a la forma de usar la cámara. Vamos, que aunque se deja ver, ha envejecido bastante mal, los efectos se ven cutres y no es nada creíble (tampoco creo que lo intentara, pero bueno). Pero es una película agradable para un sábado por la tarde.
Supongo que muchos ya la habréis visto. ¿Qué opináis?
Jamás hubiera pensado en esa película con ese titulo… de hecho, tuve que leer dos veces porque pensaba «eso lo ví»…
En latinoamérica se llamó: Viaje insólito