¿Qué tal compañeros de Cargad? Otra novela de la Herejía devorada y otra reseña que colgar. En esta ocasión he ido a por “Ángel Exterminatus” de Graham McNeill, la novela que nos cuenta la bonita historia de amor y desamor entre Fulgrim y Perturabo.
Se trata de una novela relativamente extensa, de unas 450 páginas, con un ritmo adecuado y fácil de leer. Se centra principalmente en la legión traidora de los Guerreros de Hierro, y su primarca, Perturabo, siendo la primera novela de la herejía en la que asumen el papel protagónico.
Nada, si te interesa, sigue leyendo, y recuerda, si no la has leído, tranquilo, será una reseña sin spoilers.
1. Argumento
La trama de la novela gira entorno a la búsqueda de Perturabo y Fulgrim del Ángel Exterminatus, una supuesta arma o deidad eldar de increíble poder, capaz de decantar la guerra a favor de Horus, y de como Fulgrim asciende a príncipe demonio durante el proceso.
La novela tiene una parte introductoria realmente extensa, que abarca perfectamente la mitad del tomo. En ella Perturabo y sus guerreros de Hierro están asaltando una fortaleza de sus mas odiados enemigos, los Puños Imperiales. Poco después el primarca recibirá la visita de uno de sus hermanos, Fulgrim, quien le pedirá ayuda para obtener una vieja arma milagrosa de la decadente civilización eldar.
En esta primera parte se nos presenta a la legión de los Guerreros de Hierro y su forma de ser y actuar (que mejor forma de presentar a los mejores asediadores de fortalezas de la galaxia que mostrando como estos asedian una fortaleza). Además, se nos presenta a los personajes principales, y a los primarcas.
Esta primera parte finaliza con la entrada en escena de los antagonistas de la novela, una banda de astartes leales, en su mayoría manos de hierro, que intentarán dificultar los planes de los traidores en todo lo posible.
A partir de la mitad del libro todo se convierte en una carrera entre leales y traidores para llegar al planeta donde se encuentra el ángel exterminatus, situado en el interior del ojo del terror. Ambas fuerzas entrechocaran algunas veces entre ellas y con otros seres, hasta llegar al final y clímax de la historia; un épico enfrentamiento a varias bandas, increíblemente frenético.
2. Personajes
Perturabo.
El primarca de los guerreros de hierro es sin duda el protagonista de la historia, esta es su novela de presentación, y en ella queda bien reflejado el carácter estoico del primarca. No obstante, aunque es un buen personaje, le falta algo de carisma y personalidad.
Kroger y la tetrarquia.
La tetrarquia son los más altos cargos de los Guerreros de Hierro y los consejeros y hombres más cercanos al primarca. Entre ellos destaca Kroger, un simple sargento al que el destino favorece siendo ascendido a tetrarca por el propio Perturabo.
Es un personaje al principio interesante, curioso, al venir de baja cuna siempre es sincero con su primarca, lo que le da cierta personalidad y lo diferencia del resto.
No obstante, Graham no acaba de sacarle todo el jugo, además de que en el final tiene un giro raro algo extraño que quita solidez al personaje. Además de que no llega a cerrar del todo su trama.
Fulgrim, Lucius y Fabius.
Por parte de los adoradores del dios del placer, podemos destacar a su primarca, Fulgrim así como a Lucius y Fabius.
Fulgrim sigue con su senda de locura, en esta novela ya está totalmente ido, y poco queda del reflexivo primarca que conocimos al inicio del tomo quinto, “Fulgrim”. Se le ve despreocupado, pasando un poco de todo y centrándose en sus propias obsesiones. Es mentiroso, manipulador, cruel. Está totalmente ido, pero a la vez es capaz de ser frio y calculador, pensando bien cada uno de sus movimientos antes de actuar.
Nuevamente tenemos de regreso a Lucius, el espadachín semiterno, y Fabius, el oscuro apotecario. Ninguno de los dos personajes experimenta una evolución desde sus anteriores apariciones, y se limitan a hacer lo que siempre hacen.
Fabius sigue como siempre, un maniaco, un científico despiadado capaz de cualquier cosa para llevar a cabo sus retorcidos experimentos, es un personaje grotesco, y mola.
Lucius sigue con su obsesión de querer convertirse en el mejor espadachín de toda la galaxia. En esta novela empieza a coquetear con su icónico látigo, un guiñito interesante. No obstante, no creo que brille especialmente en “Ángel Exterminatus”, y parece más que ha sido una especie de carga para Graham que un personaje con el que quisiera trabajar. Simplemente Lucius es uno de los Hijos del Emperador más célebres, por lo que tenia que meterlo, y punto, lo ha hecho y ya. En el cuento de “El Reflejo Agrietado”, por ejemplo, está mucho más desarrollado y bien llevado. Aunque el cierre de su trama me a parecido interesante.
La tripulación de la Sisypheum.
Tras el desastre de Istvan la nave Sisypheum logró escapar con algunos supervivientes de los Manos de Hierro y otras legiones leales. A partir de ese momento, la Sistpheum ha ido realizando diferente ataques en la retaguardia enemiga, acosando buques logísticos, pequeñas naves, avanzadillas de exploración, etc, a la vez que iba rescatando y reclutando a otros leales en apuros para aumentar sus efectivos.
En esta ocasión, esta pequeña banda de resegados se enfrentara a las dos legiones traidores enteras para intentar impedir, o al menos dificultar, que logren sus objetivos. Sí, suena épico, y lo es.
Su capitán, Ulrach Branthan, herido gravemente en Istvan, permanece criogenizado, y solo lo despiertan durante minutos, para informarle de las acciones que realizan sus hombres y para que este, en ese breve espacio de tiempo, dé sus órdenes y consejos. Me pareció algo muy curioso, y que demuestra el gran respeto y camaradería que hay entre sus hombres.
Para mi sus personajes son los más interesantes de la novela, tienen una muy buena dinámica entre ellos, muy natural, y hay cierta variedad.
Desde el apotecario Atesh Tersa de los Salamandras, que se encarga de cuidar al moribundo capitán de la nave, Ulrach Branthan, al increíble Guardia del Cuervo Nykona Sharrowkyn y su gran compañero de los Manos de Hierro Sabik Wayland.
Creo que hay mucha química entre los personajes, se respira camaradería, y uno verdaderamente siente sus logros con alegría y sus derrotas con tristeza y desesperación.
3. Aspectos positivos
La novela tiene un buen ritmo y es entretenida. En especial destacaría la trama de la tripulación de la Sisypheum, y como esta pequeña nave de leales rezagados intenta parar los pies a dos legiones traidoras enteras.
Otro punto a destacar es que es la primera novela en la que los Guerreros de Hierro son los protagonistas, esta es, sin duda, su novela. Si bien en los 22 tomos anteriores salé algún personaje de esta legión, o algún cuento aislado, es una facción que pasa bastante desapercibida hasta este tomo.
Los personajes están bien, si bien el primarca Perturabo no acaba de brillar como debería, está bien escrito y puedes llegar a conectar con él. Fulgrim ha completado su viaje a la locura y está más ido que nunca, lo cual, mola.
Las escenas de combate están bien escritas y son entretenidas. En general es una novela correcta, con una buena redacción, entretenida y que se hace fácil de leer.
El final es muy dinámico y frenético, todo el rato pasan cosas, y a pesar de ser una secuencia de batalla relativamente larga, no se hace especialmente pesada o tediosa.
4. Aspectos negativos
En general la novela es muy correcta, no destaca en ningún aspecto, pero tampoco falla estrepitosamente en ninguno, por lo que no tengo muchos puntos negativos que destacar.
Quizás el mas importante es que el final no me ha acabado de convencer (en la sección de sin spoilers diré porque). Es un final épico, apoteósico, muy dinámico, pero lo veo algo forzado, rápido y predecible. Me dio la sensación de que daba igual lo que hicieran los partícipes, el final sería el mismo de todas formas.
Otro fallo es Perturabo, creo que al escribirlo Graham cayó en algunas contradicciones. Al principio de la novela se nos representa como un primarca irascible, que en cualquier momento, por respirar mal o por cometer un error, te puede despedazar (literalmente se nos cuenta de un tío que acabó metido en un dreagnaut porque en un arrebato de ira Perturabo casi lo mata).
A pesar de que se nos cuenta este aspecto del primarca, lo cierto es que no se nos muestra. Al final, para construir un personaje necesitas no solo palabras, también hechos. Si en una novela haces que un personaje sea , yo que se, muy tímido, y lo recalcas cada vez que puedes, pero luego al interactuar con el resto de personajes lo pintas como un extrovertido total, hay un fallo en la construcción de ese personaje. Lo que se dice no es lo que se cuenta, y con Perturabo pasa algo semejante.
No es algo super descarado, pero choca al principio. En el primer tercio de la novela leía con cierta tensión, pensando que el primarca estallaría en cualquier momento, pero no.
5. Aportes a la saga
Ciertamente nos narra hechos importantes para la saga de la Herejía de Horus. Se nos presentan a los Guerreros de Hierro, una de las legiones traidoras, que hasta este tomo habían estado casi desaparecidos.
Además se nos narran hechos importantes para la legión de los Hijos del Emperador y su primarca Fulgrim.
6. Conclusión
Se trata de una novela por lo general correcta, sin ningún aspecto muy destacable pero tampoco negativo. A pesar de ser relativamente larga, 450 páginas, se me ha hecho entretenida y fácil de leer. Las escenas de combates son correctas, emocionantes y no se hacen pesadas.
El final es muy dinámico, pasan cosas continuamente, lo que hace que sea muy emocionante, aunque la conclusión de los diferentes arcos, en cierta manera, me han decepcionado un poco.
En general diría que es una novela que está en la media de la Herejía, no es de las mejores, pero tampoco de las malas.
Mi nota, un 7.5/10.
-Guía de lectura de los tomos 1 a 10 de la herejía aquí.
-Guía de lectura de los tomos 11 a 20 de la herejía aquí.
-“La Marca de Calth” (aquí).
-“Signus Priem” (aquí).
***Comentario final con Spoilers***.
Esta parte es para los que se hayan leído la novela, contiene spoilers, quedas avisado.
Bueno pues el final… he, aun sigues aquí, si no la has leído y tu intención es leer esta novela, algún día, no sigas. No te has ido, bueno, tú mismo.
En fin, tras las advertencias, sigamos. ¿Por qué el final no me ha acabado de convencer?
El final es épico, cierto, apoteósico, legendario, es verdad, es frenético, pasan mil cosas; que si ahora los fantasmas eldars se despiertan, que si Fulgrim va a matar a Perturabo, que si llegan los leales, que, sí eso, que si lo otro. Está guay, es decir, la narración, en sí, mola, un diez. Los efectos especiales son una joya, pero el contenido… no me acabó de convencer del todo.
El problema que tengo con el final son ciertos sucesos que hacen que sea en parte predecible y que en parte lo deja vacío. Es decir, si hagan lo que hagan los personajes todo va acabar de la misma forma ¿Qué me aporta entonces 50 páginas de gente haciendo cosas que no valen para nada?
Y creo que todo es culpa de la piedra, ya no sé que nombre tenía ni me importa saberlo, en la que Fulgrim recoge la fuerza de Perturabo para poder absorberla y poder ascender a demonio del caos.
El caso es que en medio de la refriega Perturabo consigue robar esa piedra a Fulgrim, y lanzarla al vacío, para, giro de guion, que los leales también la roben. Después de un intercambio de manos entre Luicios y el Guardia del Cuervo, los buenos consiguen recuperar la piedra y destruirla. Efecto, ninguno, Fulgrim logra ascender sin ella.
Conclusión, si Fulgrim la obtiene guay, asciende a demonio, pero si la destruyen… también guay, también asciende. Entonces porque tanta tontería, porque tanto ir cambiando de manos, sí pase lo que le pase a la puñetera piedra Fulgrim ascenderá igual.
Cuando vi que el Guardia del Cuervo iba a destruirla pensé “pero que cojones, entonces tanta tontería con la puñetera piedra, que si Fulgrim intenta convencer a Perturabo para que se la de, que si Perturabo luego la lanza al vacío para que Fulgrim no la tenga, que si luego el pájaro la coje, que si luego el Guerrero del cuervo,… tanta ostia pa que”.
Además de que se ve a leguas, incluso aunque no sepas nada previo de la herejía, que Fulgrim conseguirá ascender. Por lo que hay ciertas escenas de supuesta tensión que no son nada tensas, porque ya intuyes como irá la cosa.
Además el giro de “juajua ves esta capa que te regalé, tiene una piedra que te roba la energía” se siente barato. Es decir, hasta ese momento no vemos el efecto de esa piedra, y ahora, de repente, resulta que Perturabo está hecho mierda porque la piedra le ha quitado toda la energía.
Se supone, que se la ha ido quitando a lo largo de la novela. Graham podría haber ido mostrando poco a poco como Perturabo se siente más débil. Algún dialogo por ahí que lo deje caer, al luchar en la nave de los leales, durante el asalto, mostrarnos como algo no va bien, como se siente débil, fatigado. No se. Así cuando llegas a lo de la piedra es un giro mucho mejor construido, que no suena tanto a “te gano, porque patata” sino ha “hostias, no me jodas, por eso estaba débil el primarca”.
En lugar de tanta piedra mágica, creo que habría quedado mejor, y con más sentido, que Fulgrim hubiera ido a ese planeta a entregar los cientos de miles de almas de los Eldars al dios del placer, como pago por su ascenso y tal. Perturabo, aprovechando su carácter irascible (que se cuenta, pero que luego no se muestra) podría haberle dado un arrebato de ira al descubrir el engaño de su hermano e intentado matar a Fulgrim, o algo así, y tenemos el mismo combate épico a cuatro bandas: los guerreros de hierro y los Hijos del Emperador luchando entre sí, los eldars defendiendo su santuario y los leales atacando por la espalda en un intento de frenar el ascenso del primarca demoniaco.
Además me da la sensación de que Graham, llegado a este punto, no sabía ya que hacer con los leales. Llegan casi al final, y tampoco hacen nada, más que juguetear con la piedra esa, y poco más. casi es como si mientras estaba escribiendo se hubiera acordado de que estaban allí, y los hubiera puesto en el último capítulo para alargar un poco la cosa y ya.
No digo que sea un final malo, en absoluto, es super dinámico, pasan cosas todo el tiempo, es muy épico y trepidante, pero no sé, me chirrió un poco. No fue todo lo que pudo ser.
Un par de apuntes:
1-¿Esta seguro de que la novela es de Dan Abnett? jajajaja
2-Hay una cosa que a mi me parece muchísimo más interesante. Que es el enlace que tiene esta novela con otras obras de Mcneill sobre los guerreros de hierro. (Tormenta de Hierro, la saga ultramarines….) de hecho en esta aparecen personajes que luego son importantes allí (Aquí se conoce el origen de Honsou, Cadaras Grendel y su relación con Berossus, Barban Falk y como llega a ser conocido como el Forjador de Armas, Kroeger como pasa a ser un personaje importante…)
Gracias por la reseña!
Pues sí. Me acaba de estallar la cabeza. No se porque, en su día leí mal el nombre del autor, a lo mejor lo confundí con la última que había leído (que si era de Dan), o no sé, pero desde la primera página que pensé que estaba leyendo una novela de Dan Abnnet. Vaya, que pifiada.
Gracias por el apunte, lo corrijo.
A mi se me hizo muy tortuosa de leer, en parte porque ya me habían spoileado que era una mala novela, y porque es una novela de relleno casi 100%, todo lo que ocurre tiene poca relevancia, los personajes secundarios no aportan mucho, y más que todo es sólo una escusa para meter a Perturabo a la narrativa, pero el problema es que hay muchos otros personajes en una historia que tenía que ser solo de Perturabo, me recuerda a esas sitcoms donde invitan a un famoso de turno y lo vuelven el primo segundo del tío del vecino de la abuela del personaje principal.
He leído hasta la parte que decía que había spoilers. Gracias por la aportación y por el aviso cuando me lo lea.
Bueno, referente a Perturabo, una de mis legiones traidoras preferidas, se podría decir que el comportamiento del primarca no tiene que ser de aquella manera siempre. Como los personajes históricos, van por rachas su modo de ser. Se puede ver así.
Pero claro, ya es luego leer y ver mí opinión.
No me atreví a leer los demás usuarios por temor a que hablen de algún spoiler.