Saludos, Señores de la Guerra.
Tras las fases del juego (Movimiento, Magia, y Disparo y Combate Cuerpo a Cuerpo), y las reglas de Armas, Psicología, Monstruos y Carros, seguimos el análisis de los cambios en el libro de Octava Edición de Warhammer. Toca el turno a los Hostigadores, que se han visto realmente simplificado (bajan de 3 páginas de reglas a 1).
- La formación de Hostigadores cambia por completo, ya no es una formación abierta sino como una unidad normal, sólo que se debe dejar media pulgada (1cm más o menos) entre miniaturas; una formación que recuerda a las fotografías que vimos en las formaciones abiertas de Lustria.
- Una consecuencia directa es que las formaciones de hostigadores pasan a tener flanco y retaguardia pese a no estar trabados en combate cuerpo a cuerpo. Al tener flanco y retaguardia, DEJAN DE TENER 360 grados de visión. Esta ha sido la peor rebaja en los hostigadores: no sólo no disparan a 360 grados sino que no pueden reaccionar a cargas que vengan por retaguardia o flanco. Claro que también implica que si reciben una carga por su «lado estrecho», las miniaturas no se alinean forzosamente.
- Sin embargo, aparte de tener «formación más o menos fija», la unidad puede reorganizarse las veces que quiera excepto cuando carga. Vamos, como la caballería ligera: mientras ninguna miniatura mueva más de su M, pueden moverse libremente. Más sencillo.
- Otra consecuencia (positiva) es que no hace falta una página entera de diagramas de cómo se mueven, cargan y reciben cargas. Actúan igual que el resto de unidades, con la excepción que pueden reorganizarse las veces que quieran. Menos dudas acerca de los movimientos.
- Los hostigadores pasan a ser capaces de marchar y disparar.
En definitiva, los Hostigadores pierden puntos al recibir cargas, mantienen sus funciones básicas, y mejoran algo en el disparo. ¿Creéis que mejoran o empeoran?