Saludos, Señores de la Guerra.
Os presento un Informe de Batalla de Mathy (que nos encantan).
Escenario: Batalla Campal
Lugar: Alpha Ares, Barcelona
Fecha: domingo, 27 de enero de 2019
Bienvenidos a un nuevo Informe de Batalla de Mathy. Hoy os relataré un enfrentamiento amistoso que hice hace poco contra mi colega Jordan. Sí, se trata del mismo Jordan al que gané ampliamente en mi primera partida del Torneo de Corredores 2017, y esta vez venía con ansias de venganza…
Antes de entrar en materia, permitidme que os haga unos comentarios previos.
Primero, no conocíamos con qué ejército nos ibamos a enfrentar. Es para que entendáis cosas como que haya equipado a mi mago con un Pergamino de dispersión enfrentándome a Khorne.
Segundo, a la hora de colocar la escenografía, decidimos elegir 6 elementos y dividir el tablero en 6 cuadrantes. Colocamos cada elemento en el centro de un cuadrante al azar (sin repetir) y luego dispersamos cada uno de los elementos como si se tratara de un impacto de catapulta. Fue idea de Jordan y tengo que decir que me gustó el resultado. Personalmente me gusta que los campos de batalla contengan elementos suficientes para crear cierto reto táctico, y la verdad es que mi cabeza bullia de posibilidades al lanzar el dado para elegir lado.
El campo de batalla consistía (de este a oeste) en un lago, una colina pedregosa, un muro, dos bosques y una casa. Acordamos que la casa era terreno impasable, los dos bosques ligeros, el muro de piedra y la colina y el lago terreno difícil.
Por un momento soñé en situar mis Lanzavirotes a cubierto detrás del lago, pero parece que Jordan me leyó el pensamiento y se quedó ese lado. Más tarde me di cuenta que el muro podía realizar perfectamente la misma función mientras que el bosque central sería un escondite perfecto para mis Sombríos y la colina un parapeto inexpugnable para cubrir el flanco de alguna de mis unidades de infantería. Así que creo que al final me quedé con el mejor lado.
Tras todo esto, pregunté finalmente a Jordan con qué ejército se había presentado y me respondió que con uno de Khorne. Sudando me puse a pensar qué saber de la magia elegiría mi Archimago. Gran parte de mi estrategia pasaba por ese Comandante, y no era plan de errar el tiro. Alta Magia estaba descartada, puesto que los hechizos buenos de disipar serían inútiles contra los seguidores del Dios de los Cráneos. Pensé en el Saber de la Vida, puesto que con tanta escenografía y con el hechizo Viento Aullante, podía resultar decisivo. Pero luego caí en que mi rival iba a tener muchos dados de dispersión por lo que me convenía más lanzar pocos hechizos pero con más dados. Así que finalmente me decanté por el Saber de los Cielos, que podía potenciar mis proyectiles con el Segundo Sello de Amul, causar bajas en los Caballeros con el Rayo Atronador de Uranon (anula armaduras) o masacrar infantería lenta con el Cometa de Casandora. Al tener mi Archimago el Honor de Vidente, yo elegía qué hechizos conocía sin tener que tirarlos, y se los comuniqué a mi rival.
Lanzamos un dado y gané la tirada, con lo que Jordan situó su primera unidad sobre el tablero…
Khorne
General: Jordan
- S Señor del Caos de Khorne, Comandante. General. Marca de Khorne, Corcel del caos con barda, Escudo, Armadura de la Condenación, Espada del poder, Rostro bestial. 343
- P Paladín Legendario, Héroe. Marca de Khorne, Legendario, Espada de batalla, Escudo.162
- B Beligor, Héroe. Marca de Khorne, Armadura del caos, Arma a dos manos, Corazón oscuro, Pellejo del Caos. 157
- GK 11 Guerreros Elegidos de Khorne, Básica. Grupo de mando completo, Estandarte de guerra, Escudo. 331
- CK 5 Caballeros Elegidos de Khorne, Básica. Grupo de mando completo, Lanza de caballería. 350
- JB 5 Jinetes Bárbaros, Básica. Músico. 71
- F 6 Furias, Especial. 90
- M 10 Manada de Bestias, Especial. 5 Gors, 5 Ungors. 55
- KG 11 Khornegors, Especial. Grupo de mando completo. 162
- C Cocatriz, Singular. 70
- G Gigante, Singular. 205
- Total: 1996
Altos Elfos
General: Mathy
- A Archimago Alto Elfo, Comandante. General. Rubí crepuscular, Pergamino de dispersión, Llama del fénix, Vidente, Puro de corazón. 345
- CA Comandante Alto Elfo en Águila, Héroe, Anillo de la ira, Lanza de caballería, Armadura pesada, Escudo de escamas de dragón, Gran águila. 178
- C Comandante Alto Elfo, Héroe. Arma a dos manos, Armadura pesada, Corcel, Barda de Ithilmar, Yelmo del destino 120
- YP 7 Yelmos Plateados, Básica. Grupo de mando completo, Primeros entre iguales, Estandarte de Ellyrion, Armadura pesada, Escudo. 211
- YS 5 Yelmos Plateados, Básica. Armadura pesada, Escudo.115
- B 19 Lanceros, Básica. Grupo de mando completo. 239
- GE 5 Guardianes de Ellyrion, Especial. Lanza, Arco, Músico.127
- GS 5 Guerreros Sombríos, Especial. 75
- ME 20 Maestros de la Espada, Especial. Grupo de mando completo, Estandarte de Saphery. 340
- AG Águila Gigante , Singular 50
- L1 Lanzavirotes de Repetición, Singular 100
- L2 Lanzavirotes de Repetición, Singular 100
- Total: 2000
Despliegue
Realizamos el despliegue alternativamente , una unidad cada uno. Desde el principio vi que los Khornegors de la izquierda podían quedar fácilmente descolgados del combate principal, así que coloqué mis unidades en dirección al centro, esperando que los Sombríos entorpeciesen ese avance. Jordan cubrió ese flanco con la Cocatriz, que es un monstruo temible por su habilidad de petrificar, pero que contra elfos ve su capacidad especial muy mermada debido a la alta iniciativa de estos. Como precaución, alejé el Águila Gigante de esa zona, que era mi peor iniciativa con un 4.
El muro del centro era suficientemente amplio para cubrir ambos lanzavirotes y la unidad de lanceros con el Archimago. Yo era consciente de que, en caso de gozar del primer turno, si ponía al Mago allí perdería la mitad de conjuros por estar fuera de alcance, pero la defensa que ofrece ese obstáculo era un beneficio que no podía desperdiciar contra las tropas brutales de Khorne. Defender un muro hace que el enemigo deba impactar a 6s con todos sus ataques hasta que consiga ganar una ronda de combate. Eso sumado a la habilidad de atacar con 3 filas de los lanceros podía suponer una gran diferencia.
Coloqué a los Guardianes de Ellyrion en el centro para aprovechar su habilidad de huida simulada por ser caballería rápida, a ver si alguna unidad de Jordan picaba. Y los Maestros de la Espada a su lado, encarados para cubrir su flanco con la montaña de rocas del centro.
Finalmente, ya con todas las unidades de mi rival sobre la mesa, coloqué la pequeña unidad de Yelmos plateados sin grupo de mando en el extremo derecho del campo de batalla. Entre el lago y la montaña había un paso suficientemente amplio para amenazar el centro de las unidades de Jordan, y él no tenía con qué redirijirme. Recuerdo que pensé «Vamos a probar. Total, son pocos puntos y pueden darme muchas alegrías».
Con un repaso final al despliegue de mi rival, identifiqué como mayor peligro a su unidad de Caballeros Elegidos del centro. Liderados por un Señor del Caos, ninguna de mis unidades sería capaz de hacerles frente en combate. Tendría que ser muy cuidadoso con ellos.
Turno 1 – Altos Elfos
Gané la tirada y decidí empezar yo. Es cierto que eso me iba a dejar algo cojo de magia el primer turno, pero a cambio mi caballería podría iniciar todos los planes que había esbozado durante el despliegue.
Los Yelmos Plateados del este espolearon sus corceles y rodearon el abrupto montículo central, flanqueados por un Águila Gigante que se posó algo más adelantada. Los Maestros de la Espada tomaron posiciones en el lugar previsto mientras que los Guardianes de Ellyrion se posicionaron dentro del rango de carga del Gigante y, por si eso no fuera suficiente, prepararon sus arcos para atraelo a la trampa.
En el otro flanco, el Comandante montado en Águila Gigante adoptó una posición defensiva que esperaba que fuera disuasoria para las Furias, los Bárbaros y la Cocatriz, mientras su colega al mando de la unidad grande de Yelmos Plateados avanzaba muchísimo hasta cubrir su flanco con el bosque central. Esa unidad disponía del Estandarte de Ellyrion, que les permite Cruzar (bosques), y quería aprovecharlo, aunque fuera una temeridad.
Mi Archimago, que se había mantenido tras la cobertura ofrecida por el muro central al mando de los Lanceros, intentó lanzar el Segundo Sello de Amul, pero Jordan usó algunos de sus 8 dados de dispersión para evitarlo. Luego intenté lanzar un Cometa de Casandora con 5 dados y sorprendentemente no disfuncioné. Mi alegría fue completa cuando Jordan no logró dispersarlo, y por primera vez en mi vida coloqué un marcador de meteorito sobre el campo de batalla, a poca distancia frente a las unidades más lentas del Caos.
Los Lanzavirotes lograron infligir una herida al Gigante, mientras que los Guardianes de Ellyrion lograron captar finalmente su atención con una segunda. Los Sombríos, por su parte, no lograron acertar a nadie.
Y así acabó mi primer turno. Mi plan estaba sobre la mesa. Ahora a ver si Jordan picaba…
Turno 1 – Khorne
Al inicio de turno chequeamos a ver si caía el Cometa y… así fue. Lamentablemente mi falta de experiencia con ese hechizo había hecho que lo pusiera demasiado lejos para afectar a ninguna unidad, por lo que se desperdició.
Luego, el Gigante cargó a los Guardianes de Ellyrion que habían osado herirlo con sus flechas, haciéndolos huir de vuelta a mi zona de despliegue. Pero la carga fallida culminó mi plan de frenar el centro de Jordan impidiendo que los Caballeros Elegidos sobrepasaran la enorme mole que les impedía el paso. Ahora solamente necesitaba que mis Maestros de la Espada superaran su chequeo de pánico.
En el flanco este, la Manada de Bestias se situó en el centro del paso, dispuesta a frenar a mi unidad caballería. Los Guerreros Elegidos avanzaron hacia delante y pivotaron ligeramentepor si acaso.
En el otro flanco, las Furias se me colaron hasta la cocina y se situaron tras mi unidad de Yelmos, en un lugar en el que me impedía marchar y a la vez yo no las veía con mi Comandante en Águila. Los Jinetes Bárbaros rodearon el bosque cubriendo a la Cocatriz y los Khornegors los siguieron a lo lejos.
Lo mejor de jugar contra Khorne es que, una vez pasada la fase de movimiento, la magia y el disparo suele ser nulo. Y esta vez no fue una excepción. Preocupado por el futuro de su Manada de Bestias, Jordan me pasó el turno.
Turno 2 – Altos Elfos
Era mi segundo turno, y tenía las piezas colocadas para varios ataques. Se que era muy pronto, pero un buen general no desperdicia la oportunidad de cargar sobre el enemigo por esa razón. Pero antes, ante la visión de los Guardianes de Ellyrion huyendo, los Maestros de la Espada tuvieron que superar un chequeo de pánico. Preocupado, lancé los dados y saqué un 9, un resultado superior a su liderazgo pero por suerte igual al liderazgo del General, el Archimago que con su hosca mirada los mantuvo firmes esta vez. ¡Qué suerte que las Intrigas de la Corte me obligaran a usar ese personaje como General!
Por un lado, mi unidad de 5 Yelmos cargó a la Manada de Bestias y pivotó de tal manera que, en caso de arrasar, quedara encarada hacia el flanco de la unidad de Guerreros Elegidos a pie. Aqui se demuestra otra vez que las unidades de hostigadores son muy malas redirectoras, puesto que en el momento en que la unidad que carga toca la miniatura más cercana, el resto se coloca en formación alrededor, sin variar la dirección de la unidad que realiza la carga.
En el otro flanco, mi Comandante en Águila espoleó su montura y salió a toda velocidad hacia los Jinetes Bárbaros. Era difícil, pero si consiguiese acabar con todos ellos, podría arrasar i trabarse con la peligrosa Cocatriz que Jordan estaba protegiendo tanto.
Finalmente, me encontraba con el dilema de qué hacer con mi unidad de Yelmos Plateados con héroe. Por un lado, esa unidad iba equipada con el Estandarte de Ellyrion, por lo que podía atravesar el bosque sin problemas. Hubiera podido pasar al otro lado del bosque y amenazar a sus Caballeros desde la retaguardia. A lo que sin duda Jordan hubiera respondido cubriendo la carga con su Gigante y avanzando su caballería. No se, quizá hubiera sido la mejor jugada, ahora que lo pienso. Pero en ese momento no la vi, la verdad. Solamente vi que podía cargar a un Gigante y mi mano automáticamente recogió los dados para chequear Terror. Pasé el chequeo con holgura y, ante la duda, Jordan y yo lanzamos un dado para decidir si la carga era lateral o frontal (más que nada para ver como se colocaba mi unidad). Salió lateral, asi que coloqué mi unidad al lado del Gigante herido.
Tras todas estas cargas, reagrupé a los Guardianes de Ellyrion, que se apresuraron a cubrir la «autopista» que tenían por delante las Furias. Mi Águila Gigante se situó tras los Guerreros a pie para evitar que marcharan si mi combate contra la Manada salia terriblemente mal y los Sombríos abandonaron el bosque para impedir marchar a la unidad de Khornegors.
La fase de magia fue mal. Con 8 dados de dispersión, mi rival tan solo permitió que lanzara el Segundo Sello de Amul. Y parecía que esa sería la tónica habitual de la batalla. Mierda. Normalmente, cuando te enfrentas a un ejército de Khorne, alguna de las unidades con marca son algo más vulnerables, especialmente los carros. En esos casos, suele ser buena idea usar algunos recursos para acabar con ellos en los primeros turnos, puesto que eso significa reducir los dados de dispersión del enemigo para el resto de la partida. Pero en mi caso, las 6 marcas de Khorne estaban repartidas entre las 3 unidades principales de Jordan, y ni todo el fuego de mis virotes podría acabar con ellos pronto.
La fase de disparos fue mejor, y con un lanzavirotes logré abatir a dos Furias mientras que un Sombrío demostró una maestría sin igual al acabar con un Caballero Elegido de Khorne de un flechazo.
Y por fin llegamos al combate. Empecé por mi Comandante en Águila, que acabó sin problemas con 3 bárbaros sin sufrir ninguna herida a cambio y los hizo huir. A pesar de que no conseguí atraparlos, mi mirada estaba puesta en el chequeo de pánico de la Cocatriz, que con su liderazgo 6 esperaba que saliera por patas, pero la bestia se mantuvo firme sin duda atraída por el olor a sangre que empezaba a flotar sobre el campo de batalla.
En el otro flanco, mis Yelmos acabaron con 4 Gors sin que el restante ni las lanzas Ungors pudieran hacerles nada. La Manada perdió el aplomo y salió por patas, pero los corceles élficos los atraparon sin problemas y, con una estupenda tirada de perseguir, lograron trabarse contra el flanco de la unidad de Guerreros como había pronosticado.
En el épico combate del centro, mi unidad de Yelmos logró infligir las 4 heridas que le quedaban al Gigante y segó la vida a ese engendro, que se vengó cayendo sobre mi unidad y aplastando a 3 de mis caballeros con la mole de su cuerpo inerte. ¡Maldito bicho!. Ante la disyuntiva de arrasar y trabarme con los Caballeros o esperar que me cargaran ellos en su turno, me lo pensé muy poco. Si tenía una oportunidad, sería atacando. Así que los corceles élficos pisotearon el cadáver caído del Gigante y se lanzaron a una carga a todas luces suicida contra la mejor caballería del juego… y el general enemigo. Glups.
Y así llegamos al final de mi turno 2. Parecía que las cosas iban muy bien para los elfos. Ahora solamente tenían que resistir la furia de Khorne y todo saldría bien…
Turno 2 – Khorne
El inicio del segundo turno de Jordan no podía ser más prometedor. Esos Advenedizos Plateados, confiados en sus monturas, habían cometido la estupidez de ponerse al alcance de las tropas de los adoradores del Dios de los Cráneos. Ese era un error que no volverían a cometer… jamás.
Dado que yo había sido tan amable de cargar solito contra él, Jordan no tuvo que declarar carga alguna… Juas… Se lo pensó un poco, puesto que las 4 Furias veían al Lanzavirotes tras el muro, pero esemuro les supondría un inconveniente casi infranqueable, y decidieron volar a una posición en la que lo amenazaran sin cobertura posible.
Antes de eso, los dos Jinetes Bárbaros que quedaban se reagruparon y al ser caballería ligera lograron salir del rango de visión de mi Comandante. ¡Menuda rabia! Y no solo eso. La Cocatriz aprovechó para usarlos de nuevo como cobertura y se situó en una posición perfecta para usar su mirada petrificadora sobre mi pobre héroe.
Finalmente, los Khornegors avanzaron lentamente bordeando el bosque, impedida su marcha por los Sombríos que no dejaban de acecharlos.
En este turno no hubo magia, pero si disparo. La Cocatriz bizqueó extrañamente a mi Comandante, que apartó la mirada en seguida. Pero el objetivo del ataque petrificador era su querida montura, que por suerte hizo caso a las órdenes de mi héroe y también miró al suelo. No habría petrificación este turno…
La lucha entre los Yelmos Plateados y los Guerreros Elegidos estuvo igualada. Mis caballeros lograron abatir a 2 Guerreros y con el bono de flanco y anulando filas se las prometían bastante felices, hasta que el Paladín Legendario que lideraba los Guerreros acabó de un plumazo con dos miembros de su unidad. El combate pasó de victoria genial a derrota, puesto que mi rival tenía potencia de unidad y estandarte de los que yo carecía. Lancé los dados para ver si me quedaba otro turno, pero mis jóvenes guerreros decidieron que ya habían probado su valor, y dieron media vuelta. Por suerte, los acorazados Guerreros a pie no lograron atrapar a mi grácil caballería.
La otra unidad de Yelmos, en cambio sufrió una suerte muy distinta. Ellos ya sabían que su valerosa carga estaba condenada al fracaso, pero decidieron acabar con todos los servidores de los dioses oscuros que pudieran antes de caer. Sus lanzas de caballería hirieron múltiples veces a sus rivales, que evitaron la mayoría de heridas gracias a sus armaduras infernales. Tan sólo 2 de los servidores del Caos cayeron ante el ataque de los Asur. El Señor del Caos, en cambio, desató una oleada imparable de golpes que abatieron a elfo tras elfo y corcel tras corcel. Él y sus 2 caballeros supervivientes acabaron con la unidad de Yelmos Plateados al completo, dejando solamente al Comandante elfo con vida. Me dió mucha pena que, tras el despliegue de valor demostrado contra el Gigante, finalmente el valor de ese héroe se quebrara e intentara huir de los servidores del caos. Con una risotada, el General khornita espoleó su montura en persecución y dedicó al dios de la muerte la cabeza decapitada del último superviviente de la unidad que había osado atacarlo.
Mucho más alegre, Jordan me pasó el turno.
Turno 3 – Altos Elfos
Empezaba mi tercer turno y todo parecía indicar que la batalla pintaba muy bien para los elfos. EL sacrificio de las unidades de Yelmos no había sido en vano. Eso si, quizá si la terrible unidad de Caballeros Elegidos con el General no hubiera perseguido TANTO, me sentiría un poc más a gusto. Por suerte, en su loca persecución habian quedado «a tiro» de mi unidad de Maestros de la Espada, que podría cargar por el flanco, evitando al Señor del Caos situado en el otro lado. La situación ideal, vamos.
Declaré la carga y Jordan me recordó que su General tenía un objeto que le hacía causar miedo. Confiado, lancé los dados y miré incrédulo el nefasto resultado. Un 11. ¡Un maldito11! ¿He sacrificado las vidas de mis jinetes elfos para llegar a este punto y ahora los Maestros de la Espada se rajan por que el Señor del Caos lleva un antifaz raro? Arrrggghhhh….
Por suerte, los 3 Yelmos supervivientes lograron reagruparse, y no estaba claro si lo hicieron dentro del alcance de carga de los Guerreros del Caos.
Muy preocupado, me propuse renunciar a todo lo demás e intentar acabar con esa picadora de carne a base de proyectiles y magia. Es algo a lo que estoy acostumbrado como general skaven que soy, y esperaba que la puntería y fiabilidad de los elfos me lo pondría incluso más facil. Eso significaría renunciar a defenderme de las Furias, pero qué se le iba a hacer. Hay que hacer sacrificios. ¡Por Ulthuan!
Los Sombríos tomaron posiciones tras los Khornegors, el Águila Gigante se movió a la colina y súbitamente recordé que el Comandante en Águila llevaba un objeto mágico interesante y lo situé a cubierto tras el bosque. Finalmente, los Guardianes de Ellyrion tomaron posiciones alejados de lo Khornegors.
En la fase de magia, volví a poder conjurar solamente el Segundo Sello de Amul. Por suerte, mi Comandante en Águila estaba en el lugar perfecto para usar su Anillo de la Ira contra la unidad de Caballeros Elegidos sorprendiendo a Jordan, que había gastado todos sus dados de dispersión. La explosión consiguiente logró acabar con la vida del campeón de la unidad. «Uno menos», recuerdo que pensé.
En la fase de disparo, los Sombríos no lograron herir a la Cocatriz y los Guardianes de Ellyrion tampoco lograron acabar con ningún Jinete Bárbaro. Pero lo peor estaba por llegar. Gracias a las repeticiones del Segundo Sello de Amul, logré herir una decena de veces al General y al Portaestandarte superviviente de la unidad de Caballeros Elegidos de Khorne, pero ambos lograron superar TODAS las tiradas de salvación correspondientes (con un -2) y salieron incólumnes de mi lluvia de proyectiles. Me pregunté por qué narices no había preferido disparar un solo virote con cada Lanzavirotes y no una maldita salva.
Algo desanimado por ese mal turno, le pasé la responsabilidad de lo que sucediera a continuación a Jordan.
Turno 3 – Khorne
¡Contrataque general! ¡Muerte a discreción! ¡Cráneos para el Señor de los Cráneos!
Esas eran las consignas que recorrieron de arriba a abajo el campo de batalla mientras unidad tras unidad del caos embestía contra las defensas élficas.
Por el flanco oeste, los Khornegors declararon una carga muy lejana sobre los Guardianes de Ellyrion, que creyéndose a salvo declararon como reacción «aguantar y disparar». Cual fue su sorpresa cuando mi rival declaró que el Béligor de la unidad acarreaba un objeto llamado Corazón Oscuro, que le permitía añadir unos centímetros clave a su distancia de carga. A pesar de ello, la carga era tan lejana que necesitaba una buena tirada, que logró sacar. Las flechas de mis jinetes lograron abatir nada menos que a dos Khornegors, pero el combate pintaba muy mal para mi unidad.
Cerca de allí, la Cocatriz vió en la unidad de Sombríos un rival a su altura y, dado que su habilidad de petrificación era de una utilidad muy marginal contra los reflejos felinos de los elfos, decidió pasar a la acción directa. Los arcos de los acechadores élficos lograron herirla en dos ocasiones, pero logró finalizar su arremetida.
En el centro, las cuatro Furias supervivientes cargaron a la dotación de uno de los Lanzavirotes, que inmediatamente desenvainaron sus armas en un intento desesperado de frenar a esos demonios voladores.
Cerca de allí, el Señor del Caos y el orgulloso portador del estandarte de la unidad de Caballeros Elegidos espolearon sus monturas y, sorprendentemente, decidieron cargar a la unidad de Maestros de la Espada que había sucumbido al miedo el turno anterior. Habían detectado la duda en los corazones de esos magníficos guerreros y pensaban aprovechar el momento para arrasarlos en una explosión de sangre y vísceras.
La única alegría para los elfos en ese nefasto inico de turno fue que los últimos Yelmos Plateados estaban fuera de rango de carga de la unidad de Guerreros Elegidos que, a pesar de tener furia asesina (y por tanto poder esperar hasta la fase de movimientos obligatorios para medir si estaban en rango o no), decidieron declarar una carga al grito de «¡Que adoramos a Khorne, coño!». Reconozco que yo hubiera acercado la unidad al máximo para poder «cazar» sin problemas a los Yelmos el siguiente turno, o hubiera pasado de ellos y me hubiera girado hacia el combate central. Pero Jordan es un jugador trasfondístico y respeto absolutamente su decisión, aunque creo que en esta ocasión le perjudicaba.
La única unidad que no cargó, los Jinetes Bárbaros supervivientes, se acercaron a los Khornegors para amenazar el otro Lanzavirotes.
Sin magia y sin proyectiles, pasamos directamente a la matanza…
El combate entre las Furias y la dotación del Lanzavirotes no fue bien. Los demonios solamente lograron acabar con uno de los elfos, y el otro huyó debido al miedo, pero las Furias no pudieron trabarse con los Lanceros por el flanco como querían. En lugar de eso, su persecución acabó llevándolas fuera del tablero tras aniquilar al último operador de la máquina de guerra elfa.
Los Khornegors , en cambio, no dieron ni una sola oportunidad a la caballería ligera elfa, y en una demostración de brutalidad despiadada aniquilaron toda resistencia y arrasaron en un movimiento que los acercaba peligrosamente a los lanceros.
La carga de la Cocatriz, en cambio, resultó completamente ineficaz. Falló sus dos ataques y, aunque sus rivales elfos tampoco lograron acabar con ella, perdió el combate por potencia de unidad. Sorprendentemente, se mantuvo firme, a pesar de su mediocre liderazgo. ¡Esa maldita cosa tenía más moral que el Alcoyano!
Finalmente pasamos al choque entre el Señor del Caos y su acompañante y mi unidad inmaculada de Maestros de la Espada. Creo que voy a tener pesadillas con ese combate el resto de mi vida. Por que un servidor está acostumbrado a que estas cosas le pasen con sus skaven. Pero se supone que los Maestros de la Espada son una tropa de élite que llevan algo así como siglos entrenando con sus mandobles, y ver como 2 miniaturas de caballería barren a 7 elfos sin pestañear… ufff…. Por mucho que yo empezaba el combate con un +4 (3 filas y potencia) la cosa pintaba mal. Por suerte el heróico campeón de la unidad (paga siempre campeón, no seas burro) consiguió acabar con el portaestandarte y último superviviente de la unidad de Caballeros Elegidos de Khorne. A pesar de todo, los elfos perdieron el combate por 1 punto, y me dispuse a lanzar los dados en un chequeo clave de desmoralización. Por suerte, lo superaron, pero tendría que suceder un milagro para que una cosa así pudiera volver a repetirse.
Muy satisfecho con las matanzas que habían realizado sus hombres ese turno, Jordan lo finalizó con una sonrisa en la cara.
Turno 4 – Altos Elfos
¡Menudo cabronazo ese Señor del Caos! Si no llega a ser por la habilidad del campeón de la unidad de Maestros de la Espada, entre él y el porta se ventilan la unidad entera. ¡Pero que burrada!. Tenía nada menos que 6 ataques, armadura 1+ y había que repetir contra él las tiradas exitosas para impactar… Ufff… Si no hacía algo, mi unidad estaba perdida.
Así que, bastante cagado, declaré una carga con mi Comandante montado en Águila a la retaguardia del general caótico, con la esperanza de infligirle alguna herida (por que al ser mi héroe de potencia de unidad inferior a 5, no daba bonos estáticos por cargar por detrás).
Luego laa unidad más estática del juego, los Lanceros que acompañaban al Archimago, cambiaron su encaramiento ante la proximidad de los Khornegors. Eso si, con la mirada puesta de reojo en los Jinetes Bárbaros y las Furias que los rodeaban.
Y finalmente moví los Yelmos Plateados. Vereis. Hay gente que tiene la teoría de que, cuando las cosas van mal, es cuando los jugadores de Warhammer sacan el verdadero general que llevan dentro. Bueno, pues si es así, os aseguro que dentro de mi hay un general skaven, muy rata y muy cobarde. Por que, ante la mirada severa de mi contrincante, los Yelmos dieron media vuelta y movieron todo lo que pudieron hacia el borde de la mesa. De hecho, fui tan rata que, para ganar 5 centímetros más, ni siquiera les di la vuelta al final, y los dejé mirando a Cuenca. Si, es cierto que no tenían nada que hacer en combate frente a la unidad que les perseguía. Todos sabemos que los Guerreros Elegidos de Khorne desayunan Yelmos Plateados. Pero aun así, no pude evitar cierta sensación de estar haciendo algo mal.
En mi fase de magia, por primera vez a lo largo de la partida, mi rival ya no dispuso de sus 8 dados de dispersión habituales. Al morir los Caballeros Elegidos perdió un dado, y lo aproveché para lanzar 2 hechizos por primera vez en la fase. Curiosamente, el Segundo Sello de Amul me proporcionó las repeticiones justas para que mi Rayo Múltiple acabara con los dos Jinetes Bárbaros.
En la fase de disparo, el Lanzavirotes lanzó un solo proyectil que acabó con la vida de dos Khornegors.
Empecé la fase de combate de la mejor manera, puesto que los Sombríos consiguieron herir a la Cocatriz y acabar con ella antes de que pudiera contratacar.
Finalmente, en EL COMBATE, me planteé seriamente retar a su General con mi Comandante o el campeón de la unidad, pero al tener yo la iniciativa y superarlo en número, no quería «renunciar» a los otros ataques. Así que empecé a lanzar dados como un poseso, pero nuevamente la armadura del caos del general le salvó de todas y cada una de mis heridas. Frustado, me senté en la silla y me dispuse a ver como mis elfos pasaban por la picadora. En esos momentos me arrepentí mucho de no haber declarado ese reto, la verdad. Pero, increíblemente, Jordan falló 5 de sus 7 ataques a los Maestros de la Espada y, para más inri, en una de las dos tiradas para herir sacó un 1, por lo que al final de su fase, mi unidad armada con mandobles había perdido solamente un integrante. Yo tenía potencia, una fila y estandarte, por lo que Jordan chequeó desmoralización con un -2… y falló. ¡Falló! Una gota de sudor frio me recorrió la espalda cuando me di cuenta de lo cerca que estuve de perder ahí. Pero en el momento crucial, los oscuros dioses del caos decidieron abandonar a su súbddito y condenarlo a la derrota. O eso, o matando el primer elfo se le rompió la espada y se fue corriendo al campamento a por otra. El caso es que, gracias a la presencia de mi héroe en Águila, pude perseguirlo más allá de su huida de 27 cm y acabar con él como un verdadero elfo… por la espalda… digo… ups… Es igual. ¿A quien quiero a engañar a estas alturas? ¡Viva la Rata Cornuda!
Con la sensación de haber superado lo peor, le pasé el turno de nuevo a Jordan.
Turno 4 – Khorne
Un poco apagado tras la muerte de su general, pero muy satisfecho con la carnicería que había desatado antes de ser derrotado, Jordan volvió a declarar carga con los Guerreros Elegidos a mis tres Yelmos, a pesar de que se veía claramente que estaban fuera de alcance. Cuando se lo comenté, murmuró algo como «Khorne carga, hostias» a lo que no supe qué responder.
Las Furias aparecieron para flanquear a mis Lanceros y los Khornegors se giraron para encararse a mi lanzavirotes a la unidad que se cubría tras él.
Sin ningún combate, pasamos rápidamente a mi siguiente turno.
Turno 5 – Altos Elfos
La batalla había llegado a ese punto en el que cada unidad ya hace la guerra por su cuenta, y en el que se trata de sacar lo máximo a cada situación.
Las Furias habían sido un dolor de muelas durante toda la partida, así que, con el único fin de inmobilizarlas, declaré una carga con el Águila Gigante sobre ellas, pero mi monstruo falló el chequeo de miedo y se negó a cumplir las órdenes.
Acerqué los Maestros de la Espada todo lo que pude a los lanceros y, seguidamente, mi Archimago, disipando cualquier duda sobre su honorabilidad, se arremangó la túnica y esprintó saltando la valla hasta la seguridad que le ofrecía la unidad de élite. ¿Os he comentado ya que yo suelo jugar con skavens?
Luego mi Comandante superviviente se acercó a los Khornegors y se preparó a usar su Anillo de la Ira una segunda vez. Los Sombríos hicieron honor a su nombre y buscaron la cobertura de los árboles mientras que los Yelmos llegaron al final del tablero y se encararon hacia el enemigo buscando como fuera una escapatoria.
Entre la fase de magia y disparo, conseguí matar una Furia con un Rayo Atronador lanzado con fuerza irresistible y entre el Anillo de la Ira y los Lanzavirotes abatieron a 3 Khornegors.
¿Sería eso suficiente para salvar la unidad de lanceros?
Turno 5 – Khorne
En su turno, los Khornegors de Jordan cargaron contra el Lanzavirotes y arrasaron a su tripulación trabándose finalmente con el objetivo que codiciaban realmente: los Lanceros. Lamentablemente, la descoordinación con las Furias hizo que las tuviera que dejar en reserva, dado que si hubieran cargado contra los Lanceros antes de que llegaran los Khornegors hubieran sido sin duda masacradas. Curiosamente, esta situación en séptima edición no se hubiera dado, puesto que los combates se resolvían de uno en uno y si una unidad llegaba arrasando a un segundo combate que aun no se hubiera resuelto, dicha unidad podía volver a atacar. Pero para desgracia de Jordan, estábamos jugando con las reglas de sexta, como demuestran sus unidades con frontal de 4.
Finalmente, los Guerreros Elegidos de Khorne se decidieron a correr pensando que finalmente habían conseguido acorralar a los Yelmos a los que hacía 3 turnos que perseguían sin descanso.
Turno 6 – Altos Elfos
Incapaz de ver a las Furias por culpa del combate tras el muro, mi Comandante ordenó a su montura elevarse y posarse en algún lugar desde dónde les pudiera apuntar con su anillo.
Por el otro lado, los Maestros de la Espada también acercaron al Archimago a los demonios. Habia llegado el momento de desatar la magia de los Asur contra aquellas abominaciones.
Finalmente, la unidad de Yelmos encontró el hueco suficiente para, sin marchar, salir del arco de visión de los frustrados Guerreros Elegidos de Khorne, que no se lo podían creer.
En la fase de magia, entre el Archimago y, sobre todo, el Anillo de la Ira, las Furias fueron vaporizadas.
En combate, en cambio, los 5 Khornegors supervivientes y su líder lograron acabar con la vida de mi campeón y 4 Lanceros más. Los elfos contratacaron y lograron abatir a 2 hombres bestia, lo que dejaba el combate en tablas. Por suerte, una de las dos bajas que realicé en mi turno fue el músico, por lo que el músico de los Lanceros desempataría el combate con su trompeta (no pregunteis). Jordan pasó sin problemas su chequeo de desmoralización, pero su unidad perdió la Furia Asesina que la hacía tan peligrosa.
Y ya solamente quedó un turno…
Turno 6 – Khorne
Por suerte para mi, la unidad de Khornegors llegó tan mermada que no pudieron hacer frente a los Lanceros. No quería ni pensar lo que hubiera pasado si llegan a ganar el combate, los chequeos de pánico que hubieran provocado.
Ya que era el final del último turno, Jordan se limitító a terminar el combate que teníamos entre manos. Y ciertamente, cuando mis chicos empalaron a sus 2 gors y su Beligor se quedó solo, el combate terminó, con ese personaje huyendo para salvar la vida.
Y así llegamos al final de la batalla. Una mañana muy interesante contra un buen jugador que no me puso las cosas fáciles en ningún momento.
RESULTADO: VICTÓRIA DECISIVA para los ALTOS ELFOS. ¡Yuhuuuuuuu!
CONCLUSIONES: Ha sido una partida mucho más tensa y ajustada de lo que refleja el resultado final. Eso suele pasar cuando uno de los bandos lleva mucha magia o disparo, que a medida que avanza la partida y las defensas iniciales caen, la matanza es mucho mayor. Pero eso no quita que, por ejemplo, al final del turno 3 no tenía ni idea de si iba a conseguir ganar esta partida. Muy divertida, la verdad. Y un placer jugar con Jordan como siempre.
LO MEJOR ELFO: Para mi, lo mejor ha sido ver como mi plan de batalla inicial funcionaba muy bien. Los Yelmos por el paso este, los Ellyriones impidiendo la marcha del centro… Eso, y el uso continuado de la escenografía para ganar cierta ventaja.
LO PEOR ELFO: Mi inexperiencia con el ejército, que se traduce constantemente en dudas, acciones impropias, mala selección de objeticvos y en general, una sensación como la que tienes cuando sin querer te pones la chaqueta de otra persona. Quería poner aquí también el no haber visto la oportunidad de atravesar el bosque en turno 2 y colocar mi unidad amenazando la retaguardia Khornita, pero la verdad es que es imposible saber qué habría salido de una maniobra tan extrema. Sinceramente, dudo que me hubiera ido mejor. Lo que si que he aprendido es a retar ante un enemigo tan terrible como el Señor del Caos. Es algo que recordaré.
LO MEJOR CAOS: Para mi, la lista era muy buena. Sin megaunidades innecesarias pero con muchísima pegada, las unidades de bestias aportan variedad táctica y unidades prescindibles. Quizá haría unos pequeños cambios menores, pero en general, muy interesante.
LO PEOR DEL CAOS: Opino que el despliegue. No sé por qué, con la de unidades rápidas que tenía, desplegó en 2 filas y super centrado. A mi me encanta «hacer grande el campo». La manada de bestias hubiera quedado genial delante del bosque. Los bárbaros cubriendo el paso, quizá con el gigante. Los Khornegors y los Caballeros tendrían que haber intercambiado sus puestos. Solo con estas 3 cosas, habría sido una batalla completamente diferente.
En resúmen, una buena batalla, muy interesante a nivel táctico, que se resolvió a mi favor por algunas malas tiradas de mi rival en momentos clave y en la que aprendí un montón de como jugar (y como no jugar) con los Asur.
Ah, y por prometer que no quede. Como ya comenté, estoy esperando que Nama pinte su ejército de Bretonia para poder jugar la MÍTICA Batalla por la Maisontaal, el escenario a tres bandas más famoso del mundo de Warhammer. Espero que no me pase como con mi última promesa… En Corredores 2018 mi teléfono se quedó extrañamente sin batería en muy poco tiempo y no pude hacer informe alguno.
¡Hasta pronto, Generales!
Mathy
joder vaya fotos que ponéis últimamente, realmente no hay forma de poner algo mejor que 480×270?
@vothe estaba por decir lo mismo. Por lo demás muy buen informe. Se agradece que alguien se tome en escribir algo así.
Ups, perdón. Ha sido porque en vez de hacer fotos, he recortado fotogramas de los videos que hice para el informe. Tomo nota, para seguir mejorando.
Que kurrada de informe enhorabuena.
¿Por cierto Namarie cuando prevees que salgan los MDN actuales con las erratas incluidas?
En mi grupo los esperamos como agua de mayo, xD!
@Xavier Macias: Tampoco es solo cosa tuya, últimamente todos los que publicáis en cargad ponéis fotos minúsculas. :((
@Kvothe: Respecto del tamaño de las fotos…
En el antiguo wordpress había una opción de poner imágenes y editarlas para que cuando se pulsara sobre ellas, se abrieran en ventana nueva (o pestaña nueva), y determinar el tamaño. Con el nuevo wordpress aún estamos en proceso de saber cómo cojoños hacer lo de antes, pero ahora.
Por otro lado, existe (como siempre lo ha habido) la opción de abrir imagen en pestaña nueva. Y de esa forma se ve la imagen en el tamaño real (con las limitaciones técnicas del dispositivo de visualización).
(Para quien no sepa cómo hacerlo, desde el ordenador botón derecho del ratón sobre una imagen, y luego elige «abrir en pestaña nueva»).
Genial el informe Mathy! Muy clara y entretenida la narración, que realmente te mete en la tensión de la partida, y los diagramas son fantásticos para seguir la acción.
El cebo para retrasar a los caballeros elegidos del rival fue muy buena idea, aunque la posterior carga de los Yelmos me tenía en ascuas, porque ambos salváis a 4+, los khornitas tienen las de ganar en ataques pero cada baja en carga eran 3 ataques menos que recibías (y aún así el señor del caos lo pondría difícil). Así que realmente dependía de si Jordan sacaba buenas tiradas de salvación.
Creo que la maniobra de colarse a través del bosque en la retaguardia habría funcionado porque durante el turno que necesitaban los Yelmos para girarse había un Águila por la zona.
Los pobres Maestros no tenían su día, ese 11 en el Miedo fue clave al evitar la carga!
Coincido en que ambas listas son muy interesantes e intercambiar en el despliegue a los khornegors y caballeros habría resultado en una partida muy diferente.
De nuevo, muy buen informe!
@David: la mayoría de fotos que ponéis aún abiertas en pertaña nueva son pequeñas. En tus posts de escalada tienes fotos de 471×362 o 466×315
@Kvothe: @Kvothe: Me refería a los posts de escalada de Namarie.
Me acaban de comentar un error que cometí durante la partida. Los obstáculos defendidos no afectan a las criaturas voladoras. Pag 69 del manual. ¡Lo siento mucho Jordan! Esas Furias podrían haber acabado con el Lanzavirotes mucho antes. Te informé mal.
Es lo que me gusta de los informes de batalla. Por mucho que presumas de conocer las reglas, casi siempre hay algo que haces mal.
¡Esta ya no se me olvida!
@Xavier Macias: hola Mathy, no me hagas mucho caso pero si cargabas a algo que causase miedo teniendo tu mayor potencia y fallabas el chequeo no cargabas igual impactando a 6s?
Genial el informe, mucha calidad en el texto y los diagramas. Sabor puro a white dwarf pagada en pesetas jajajajja. Muchísimas gracias, lo he disfrutado mucho.
En mi opinión, el campeón de los maestros de la espada tenía que haber desafiado a la primera oportunidad al señor del caos. Hubiera muerto y el número de heridas sobrantes del desafío se hubieran contado para la resolución del combate pero no habrían muerto tantos maestros de la espada, que quizá no hubieran perdido y habrían podido envolver por los flancos para atacar más el turno siguiente o tendrías la unidad con más efectivos para otros turnos.
El comandante en águila al cargar por la retaguardia si da +2 por a la resolución de combate, lo que no hace es negar filas porque no tiene potencia 5 o superior).
El impactar a 6 por el miedo es cuando te cargan y tienes potencia de unidad mayor.
@sr_caledor: Ciertamente, el no retar con el campeón de los Maestros fue un error. Pero al final me ayudó mucho, puesto que fue ese mismo campeón el que eliminó al portaestandarte de los caballeros elegidos y me dio la oportunidad de sobrevivir. Curiosidades de la vida.
Por lo que respecta al bono de ataque por la retaguadia, en el manual de sexta, página 73, pone claramente que se necesita una unidad de potencia 5 o más. Yo siempre lo había contado como comentas, pero he mirado faqs y todo y no encuentro nada que contradiga esa explicación. Me encantaría que me ilustrases al respecto, puesto que me gusta llevar unidades pequeñas.
Me alegro que te haya gustado el informe. Espero hacer otro pronto.
@Granizo Games: Ya tenemos listas las propuestas para todos los ejércitos y ahora estamos repasando pjs especiales. Creemos que con el inicio del próximo mes, empezaremos a publicar una a una nuestras propuestas de cada libro para comentarlas con vosotros al ritmo de 2 a la semana.
Muy buen informe de batalla. Da gusto leeros.
Una duda, creo que leí lo de volar 50 cm. En 6ª no se volaba todavía 60 cm o me estoy liando con 5ª?
@Reik: En el manual pone 60cm, pero es una errata. Son 50cm.
Buenas. Me he ido directo al reglamento y para mi sorpresa (estaba al 99% convencido) el modificador de cargar por el flanco y retaguardia es solo si tienes potencia 5 o superior. Así que rectifico.
Este hecho me crea la necesidad de pedir un documento que recoja las faqs del reglamento de 6º. Alguien las tiene recogidas y «centralizadas»?
sr_caledor@hotmail.com Gracias
@sr_caledor:
Estamos trabajando en ello 😛
De momento puedes buscar la recopilación de Burjassot para 6ª edición (tienen otra para 7ª), que tiene la mayoría, aunque no todo.
Genial informe como siempre, Mathy! Las listas me encantan, trasfondísticas sin ceder utilidad, buenas sin burradas…
sigue trayendo informes siempre que puedas, que siempre es una gozada leerlos