Regreso al Servicio Activo 2: Primeras impresiones de campo

Saludos Comandantes.

Estoy de vuelta, tras mis primeras partidas en 7ª edición ya tengo una idea de cómo van las cosas ahora mismo. Han sido partidas bastante amistosas aunque no voy a entrar en detalles de cómo han ido ni explicarlas mucho (por no decir que me han sobado todo el morro), pero he pillado experiencia para acostumbrarme e ir mejorando y adaptándome. Excepto a cosas que podría haber mejorado en estilo de juego y decisiones en el momento, que eso no creo que ayude al artículo, ¿Qué he aprendido del campo de batalla de 7ª?

• Cuando digo de que hay que olvidarse de la TOE tradicional, LO DIGO EN SERIO. De verdad, cambia todo el juego. Antes te esperabas que, por muy elitista, rápido o pesado que fuera un ejército, al menos hubiera unas Líneas que pudieras machacar con relativa impunidad y/o conseguir Primera Sangre; ahora ya no. Al armarse todo un ejército a partir de Formaciones, no es necesario mirar las tropas de línea como una carga necesaria. Si quieres las llevas y si no (o no llegas a la formación que quieres) elige la/s formación/es o super-formaciones que quieras y adelante. Para los que estén preocupados por esto hay que decir que…
  • En mi segunda partida fui con dos formaciones: Destacamento de Armas Combinadas y un Mayhem Pack (formación de 3 brutos infernales). Y porque los Marines del Caos no tenemos muchas formaciones, que si no hubiese llevado alguna más.

• Las formaciones no son para tanto. …tampoco hay que tenerles miedo. Si, probablemente varias de ellas sean las peores pesadillas de tu ejército, añadidas sin apenas límites y aún más fuertes; pero normalmente no los mejoran tanto o obligan a jugarlos de una determinada manera. Así ya puedes saber, si conoces las formaciones de tu rival lo suficiente, cómo te va a venir y contrarrestarlo. Todo tiene un punto débil, e incluso las formaciones más poderosas lo tienen.
  • En la primera partida, me enfrenté a un Ángel Sangriento (¡Hola Snal, de Forjados en Batalla!) en la que utilizó el destacamento Archangels Strike Force (básicamente, Veteranos y Termis). Aunque me acabó barriendo, no me pareció una formación particularmente dura; un alpha strike de manual, si aguantas el primer golpe, puedes tomar represalias.

• A tu manera o carretera. Básicamente, tienes una libertad del copón para hacerte el ejército como tú quieras, y cada vez más. Aprovéchala. Ahora el jefe es tu estilo de juego y las limitaciones del pasado de facción, TOE, tipo de unidad y demás no son tan importantes. Así que ve a tu rollo.

• Las Tier son un hecho. He pedido prestado el término de la escena competitiva de los videojuegos, pero aquí se aplica muy bien a algo que demasiados sabemos: hay facciones mejores y peores y algunas, como Adepta Sororitas, no es probable que cambien su suerte en el futuro próximo (aunque cosas más raras ha hecho GW antes). Aceptar esto, con o sin quejas, y ponerle remedio es un paso necesario en 7ª edición. Los remedios más comunes son dataslates digitales y aliados que pueden darte más opciones. Pero respecto a ello os diré una nota tan importante que la voy a subrayar y a poner partes en negrita: No sacrifiques ni tu colección, ni tu estilo de juego ni tus gustos por un poder que perfectamente puede ser inútil en la misma edición o en el mismo año, si te compras algo, asegúrate de que es porque te gusta. Demasiados jugadores (en 40k y en otros juegos) han descubierto con horror que se han gastado cientos de euros en miniaturas que no les gustaban para mejorar un ejército o hacerlo competitivo para al mes siguiente no necesitar esas mejoras o acabar teniendo su ejército peor de lo que estaba. Lo que nos lleva también a…
  • Se empieza a notar que los Marines del Caos no son de los ejércitos que están más arriba. Y de que esa posición se basa más que nada en ciertas unidades y combos que requieren un estilo de juego que a mí no me gusta lo que se dice nada, eh…

• No estáis solos. …Que los aliados son ahora mucho más frecuentes de ver respecto a 6ª. Lo más normal es reforzar tu ejército o tu lista con unas pocas unidades o una formación de otro ejército para pulir puntos débiles o para potenciar puntos fuertes. Como antes, hay facciones y unidades mejores y peores para aliarse, pero muchas dependen del estilo de cada uno y de su facción principal. Ésta es una de las mejores (o la mejor) ventajas de los Ejércitos del Imperio.
  • Una de las partidas me enfrenté a un Lobo Espacial con un destacamento aliado de marines Codex, y ese chico no llevaba mucho tiempo tiempo en el hobby. Sobre mis propios aliados… eso ya lo comentaré más adelante.

• Deathstars. Supongo que todos entenderán el concepto (combo de unidades que resultan casi del todo imparables con un altísimo coste en puntos). Si alguien creía que eventualmente nos libraríamos de ellas, tristemente no es así. Debido a la organización actual, mucha gente las tiene disponibles y “curiosamente” ya no tienen tanto estigma de culodurismo de antaño; así que son más frecuentes de ver. Depende de cada uno si las quiere usar o no, pero aun así recomiendo mirarlas y intentar averiguar formas de hacerlas más asequibles, aunque no signifique destruirlas. No es fácil, pero es posible.
  • En la misma partida en la que me enfrenté a Lobos y Codex, me sacaron una versión descafeinada de la puñetera Wolfstar: una Deathstar basada en la puñetera Caballería de Lobo de Trueno. Acabó tal y como pensáis que acabó.

• Cuanto más grandes son… …más se queja la gente. Superpesados. Que si desescalan el juego, que si no deberían estar ahí, que si son demasiado poderosos(¿huh? ¿Acaso se esperaban matar titanes con gretchins?)… Polémicas aparte, prepárate para enfrentarte a ellos. Fuerzas D con cierta mesura o varias armas AT poderosas te servirán bastante bien, siempre que asumas que vas a perder gente. Si te equipas bien, no suelen ser tan duros, con una enfurecedora excepción.
  • Sólo me he enfrentado a dos superpesados hasta el momento: un Caballero Imperial y un Wraithknight. Al primero lo pude manejar: costó y me liquidó una porción considerable de mi ejército pero lo conseguí derribar con mis Brutos, Aniquiladores y el Vindicator. Con el Wraithknight… no tuve tanta suerte.

• Cambia el chip. Lo mencioné en el artículo anterior y lo recalco ahora: el presente es digital. Muchos pensarán “Yo siempre he jugado con libros y eso no lo voy a cambiar nunca”. Muy bien por ti, pero luego si te pasan por encima con una formación que no has querido leer porque solo está en digital, no te quejes. No digo ya que te pilles, o que siquiera mires; todas las ediciones digitales o dataslates de todas las facciones, pero echarle un ojo a las que más se oyen por ahí o las que crees que puede meterte tu rival no te harán daño. Como tampoco lo hará descargarte y mirar las de tu propia facción (Si es un consuelo, las copisterías imprimen y encuadernan por un precio razonable). Hasta los Barbaslargas más tradicionalistas subieron que aceptar los cañones cuando vieron lo que podían hacer.
  • No sé dónde estaría ahora sin la Dataslate: Hellbrutes. Y estoy mirando la Dataslate: Cypher con curiosidad…

• Vórtice de Guerra mola. Sep, los nuevos tipos de misiones están muy bien, para qué mentir. Te mantiene despierto durante toda la partida y es un buen cambio respecto al estilo tradicional de objetivos. Una partida de vórtice de vez en cuando no viene mal, pero si lo hacéis, llevaos libreta.
  • De momento llevo un 50/50 de partidas en Guerra Eterna y Vórtice de Guerra. Y viendo cómo me lo he pasado en Vórtice, prefiero desequilibrar la balanza.

• No presupongas nada. Si tu unidad siempre ha hecho algo, y lo ha hecho bien; no significa que haya a hacer lo mismo ahora en la misma medida. Esto es algo que cualquier jugador con varias ediciones a sus espaldas sabe, pero el rol y utilidad de las unidades cambia con el tiempo. Si antes con dos o tres Leman Russ ya metías el miedo en el cuerpo a un Tiránido, ahora solo conseguirás que te los evite o que los «Vectorice» hasta la muerte, en cambio si en lugar de Leman Russ hablamos de Mantícores, de Wyverns o de un Baneblade, ahí ya cambia la cosa.
  • Snif, mi Vindicator era antes el terror de vehículos y tropas que no estuvieran escondidas tras una ruina. Ahora es ÉL el que tiene que esconderse en ruinas para que no lo destrocen, y ni aun así a veces…

De momento ésto es lo que he podido aprender. Aún me queda mucho, pero con esto ya tengo una base en la que amoldarme y seguir ampliando mi ejército y experiencia para mejorar en 7ª. Espero que a vosotros os sirva también para re-introduciros en 7ª y a que no os pillen con el culo muy al raso.

Saludos comandantes, y que los dados estén de vuestro lado.