Saludos, señores de la guerra.
Ayer por la tarde me fuí al Triangulo Friki de Barcelona (vamos, a la zona de Arc de Triomf) a adquirir material para el trasfondo de Natasha Tasdín… bueno, es una mera excusa para comprarme la «Guía del Mundo» de los Reinos de Hierro y el Superiority… y también una No Quarter que analizaré algún día… o no. Y esto lo hice pasando por Kaburi, Kelesumo y Gigamesh.
Pero el motivo del post fue lo que me encontré al entrar en Kaburi. Para empezar entré intentando encontrar las cosas (paso una vez cada alineación planetaria, así que siempre que voy nunca me acuerdo de donde está qué), así que me pasé un rato «mirando». Lo bueno del asunto es que el dependiente estaba en pleno debate/tertulia con cuatro jugadores hablando sobre el magno tema de la teología cuarentamilerista (vamos, sobre el culto al emperador en warhammer 40.000).
No sabéis la alegría que me dió. No me estuve en la tienda ni medio minuto (prisa, prisa, prisa, prisa… vivo con prisas contínuas, que queréis que os diga) pero bastó para confirmar que aquello era un «Debate De Tienda Freak». Y cómo autor del artículo «Nostalgia Dorada» del ¡Cargad! nº18 la verdad es que fue toda una alegría encontrarme con este tipo de debates en una tienda del hobby.
Sin duda una alegría.
Y no sólo eso. Quizás sea la crisis y Namarie tenga razón (apuntate una, neng) y con las crisis económicas aumenta la afluencia a las tiendas y la vuelta a las partidas de wargames y de rol.
No es una tontería.
A parte de las idas de olla de Namarie sobre la evasión de la realidad a través de los juegos de rol y de los wargames (cosa con la que estoy de acuerdo pero simplemente no creo que justifique por sí mismo una tendencia) cabe decir que jugar a rol o a wargames es sumamente económico.
Que ningún jugador de Warhammer se me tire al cuello plis.
Pensadlo bien. Comparad lo que os cuesta ir una tarde al cine o una noche de compas con el precio de un libro de rol o de un blister (y si no es un blister de warhammer o de warmachine, mejor, que será más barato A mi cuando era joven (cómo si fuera un abuelete…), en plena crisis de los 90, me funcionó muy bien. Tenía más dinero que los colegas sólo por que jugaba a rol sábado sí y sábado no… sábado tarde y sábado noche. y oye. Ahorrabas una pasta gansa (las tapas en el super son mucho más baratas que en el bar).
Sea por lo que sea. Sea con lo que sea (rol, tablero, cartas, comics, etc…) me alegra esta percepción de aumento de los mal llamados entretenimientos freaks.
Yad ho, groja UL a todos.