Saludos, Señores de la Guerra.

A partir de ahora (y de forma paralela al Reglamento Anotado, los Catalogando y MdN Experimental) voy a empezar a ir publicando escenarios para Warhammer. Estos escenarios serán recopilados «en bonito» mucho más adelante en un MdN:Escenarios y los iremos publicando en una sección propia del blog para que podáis ir jugando y probando. Como veréis, en la mayoría de casos es fácil extrapolar estos escenarios a otros sistemas de juego (como WH8.5, Reforged, Kings of War o The Ninth Age).

Empezaremos con la Batalla en los Montes Apuccini…

Batalla en los Montes Apuccini 

Mercenarios vs Orcos y Goblins, año 978 según el Calendario Imperial.

Situación histórica

Cuatro siglos después de la fundación de Luccini por los gemelos Lucan y Luccina, una gran marea horda invadió Tilea. Aquello fue la prueba de fuego del creciente ejército de las ciudades independientes de Tilea, que fueron ganando en experiencia y aprendiendo de sus errores. Los beneficios se invertían en nuevo armamento para retener a los invasores pielverdes. Con el tiempo se dieron cuenta que la única solución era unirse.

Así, en el año 491 un ejército combinado de toda Tilea consiguió frenar al tremendo ¡Whaaagh! que amenazaba con invadir toda la península, haciéndolos retroceder gradualmente hasta los Montes Apuccini. Los tileanos no consiguieron acabar con la amenaza por completo. Es más, por culpa de la guerra civil tileana (760-790) los Orcos vieron la debilidad y empezaron nuevamente a realizar incursiones a las ciudades más al Norte. No sería hasta cien años después del final de la Guerra Civil que los Tileanos volverían a empujar a la marea verde. 

La batalla final se realizó entre unos crecidos soldados tileanos y los restos del antaño enorme ejército pielverde, liderados (es un decir) bajo Karrugh el Mazkahuezoz. La suerte estaba de parte de los tileanos; irónicamente, las rencillas entre la alianza tileana no se habían curado y los pielesverdes tenían la increíble visión de unos humanos con una animosidad entre ellos mayor que la suya…

Resumen

La batalla es la gran batalla de la expulsión de los orcos en los Montes Apuccini en la que un ejército mercenario compuesto por tropas de toda Tilea intenta hacer huir a los Orcos y Goblins.

El campo de batalla

Se juega sobre un tablero de 120x180cm a lo largo. Coloca un par de colinas en la zona de despliegue pielverde, un par de bosques y un terreno difícil en la zona central (puede ser un lago en vez de un terreno difícil), y otro bosque en la zona de despliegue mercenaria.

Los ejércitos

Crea dos listas de ejército según los Manuscritos de Nuth Mercenarios y Orcos y Goblins, de unos 2.500 puntos cada uno.

No se permiten personajes especiales ni regimientos de renombre (¡aún no estaban en activo!). 

Los personajes del ejército Mercenario debe ser de tipo Humano.

Despliegue

Alterno. Cada jugador lanza 1D6; el que obtenga un resultado más alto elige qué jugador empieza a desplegar, y se despliegan las unidades alternando un jugador y el otro. Las máquinas de guerra se despliegan juntas. Los personajes se despliegan juntos.

Quién va primero

El jugador tileano está atacando, así que empieza el jugador mercenario.

Duración

La batalla dura 6 turnos.

Condiciones de victoria

Cuenta únicamente los puntos destruidos (o huyendo) del jugador que lleva Orcos y Goblins. No tengas en cuenta cuadrantes ni puntos extra por personajes o estandartes; tan sólo las bajas (si haces más de la mitad de heridas a la unidad, cuenta la mitad de los puntos, de forma habitual). No importa cuántos Mercenarios hayan muerto.

Si al final de la batalla el jugador pielverde controla menos de 1000 puntos de su ejército (o sea, si el jugador mercenario ha matado o hecho huir 1500 puntos enemigos o más), la victoria es para el jugador mercenario.

Si al final de la batalla el jugador pielverde controla más de 1500 puntos de su ejército (o sea, si el jugador mercenario ha matado o hecho huir 1000 puntos o menos), la victoria es para el jugador pielverde.

En los demás casos (quedan entre 1000 y 1500 puntos pielverde no huyendo), la batalla es un empate.

Reglas especiales

Noz van a dar pa’l pelo… Los orcos y goblins saben que va a haber lucha, así que están guardando fuerzas y no están para pegarse entre ellos… o menos de lo habitual. Para representar esta “konzentrazión” tan inusual, todas las unidades pueden repetir los chequeos fallados de animosidad (recuerda que no puedes repetir dos veces una tirada).

¡Vámonoz por piernaz! Los pielesverdes no están muy contentos con el devenir de la campaña y creen que es mejor refugiarse en el Imperio y esperarse a otro ¡Whaaagh!. Por tanto, para efectos de reagrupar tropas que huyen, todas las tropas del jugador pielverde tienen L-1 (dicho de otra forma, tienen un penalizador de +1 a la tirada).

Los de Remas os vamos a enseñar cómo se hacen las cosas, bambini… Los tileanos están con la moral muy alta, pero están empezando a aflorar antiguas rencillas y todos están intentando demostrar que son mejores que los demás. Todas las unidades del ejército mercenario, de tipo Humano, y formadas por 5 miniaturas o más, se ven sujetas a la regla Furia Asesina (¡hasta que la pierdan!).

Desarrollo histórico

Finalmente, el ejército mercenario, fruto de la alianza de las distintas ciudades estado, pudo sobreponerse a sus rencillas personales y masacró al ejército pielverde. Los piqueros iban cantando el himno de su ciudad mientras corrían hacia sus enemigos, lo que hacía que los demás regimientos intentasen cargar contra oponentes mayores y cantando más fuerte. La victoria finalmente fue de la alianza tileana, expulsando a los Orcos y Goblins… al menos durante veinte años.

Jugando con otros ejércitos

Mientras que el bando Orco es complicado de sustituir (no muchas facciones tienen “animosidad”), en vez de Mercenarios pueden ser ciudadanos imperiales de distintas provincias después de una guerra civil, o elfos oscuros ansiosos por demostrar quién es el mejor (¡quizá un Noble haya prometido que los elfos menos agresivos sean pasto de los gélidos!).