Saludos, Señores de la Guerra.
Hoy tenemos la primera parte de un Informe de Batalla de Warhammer (usando Manuscritos de Nuth) que se ha currado el parroquiano Enric Portell. ¿Preparados?
¡Muy buenas de nuevo! Espero que hayáis traído prisioneros humanos o pielesverdes para esclavizar, o incluso algún enano perdido, para calentar los hornos de Hashut, porque hoy el tema va de Enanos del Caos, y mejor tener algo con que contentarles.
Primer informe de batalla que publico en el blog… y tocaba entrar por la puerta grande 😉 En 2021, Nama publicó unas reglas para jugar la histórica batalla en que los Orcos Negros se rebelan contra sus amos Enanos del Caos y están a punto de masacrarlos, hasta que los traicioneros hobgoblins cambian de bando y se unen a sus antiguos captores, negociando un trato mejor.
Pues… en otoño del año pasado, varios compañeros empezaron a pensar cómo hacer esta partida a lo grande, juntando varios jugadores, a más puntos, y añadir todas las locuras que se les ocurrieran. Al principio me reclutaron como pielverde, pero finalmente (como es lógico) había bastantes más voluntarios orcos y goblins que enanos del caos, así que como buen hobgoblin me pasé de bando, jejeje. Total, fueron planeando la partida en función de los jugadores, y al final hubo unas cuantas bajas, reemplazos, etc. Y la cosa quedó del siguiente modo
Objetivos
un ejército de 6000 puntos de pielesverdes dirigido por cinco jugadores intentará atravesar los muros de Zharr Naggrund y escapar, mientras que dos enanos del caos, con 4000 puntos, intentarán frenarlos. Pero no todo pinta tan mal para los barbudos… Puesto que, en el tercer turno, un tercer jugador, hobgoblin, con 2000 puntos, aparecerá a traición por la retaguardia pielverde para aplastarlos por la espalda.
Se contarían puntos de victoria del modo normal (sin cuadrantes… y acabo de ver que pusimos sin estandartes, pero esto último sí que lo contamos…), pero, además, el bando pielverde obtendría los puntos de cualquier miniatura que lograra llegar al hueco de las murallas (aunque fuera solo la puntita, o estuviera huyendo…). Es decir, si un gigante cruza las murallas, se llevaría 205 puntos del gigante (y lógicamente, los enanos del caos no obtendríamos esos puntos como si hubiera huido)
*Además, teóricamente habría objetivos personales ocultos aleatorios… pero nos olvidamos totalmente de ellos en el caos del despliegue XD
Escenario y reglas del mismo
Grosso modo. Si os interesan las reglas enteras pedídmelo por los comentarios y las añado en otro post o así), pondríamos unas murallas con 3 espacios de hueco (una zona derruida bien grande, de 60cm en el centro, y dos portones de 20cm a ambos lados). Los enanos del caos pueden desplegar hasta 20cm por delante de las murallas, o en los huecos que se han creado.
A 60cm de la muralla, despliegan los pielesverdes, que tendrían el objetivo de llegar hasta los huecos de la muralla (así que, técnicamente, “la zona neutral” pasaba a ser de 40cm, con 20cm de zona defensiva para los enanos).
Además, colocamos tres edificios en la zona neutral, para añadir más caos a la situación. Los enanos del caos podíamos dejar una unidad dentro del edificio, y si los pielesverdes las capturaban, obtendrían beneficios: 1) una armería, que permitiría a los pielesverdes que la conquistaran equiparse con armamento adicional que no hubieran pagado sus tropas, 2) Unos corrales, que permitiría a cualquier unidad de infantería pielverde “convertirse” en una unidad equivalente en puntos de caballería (¿jabalinería y lobería?), y 3) Una mazmorra de monstruos, con un monstruo en su interior que podría aparecer (o no) en cualquiera de los turnos rompiendo sus ataduras, poniéndose del lado de uno de los dos ejércitos, o actuando de manera aleatoria… *
*Diseñaron unas reglas para facilitar la captura de edificios, (que consistían en que habría combates de 10 miniaturas atacantes contra 10 defensoras. Los atacantes irían a 6s hasta que ganen una ronda de combate, y en la resolución se contaría solo las bajas. En caso de que los defensores huyan… serían automáticamente “cazados” y el atacante entraría en el edificio. Los gigantes, trolls y demás pueden atacar al defensor de la manera habitual (sin ir a 6s) pero no pueden capturar edificios, y los defensores podrán huir sin ser perseguidos…).
Aparte, en uno de los flancos iría un río de lava infranqueable con unos puentes, que estamos en Zharr Naggrund y eso mola 😉.
Para acabar… los pielesverdes podrían repetir todos los chequeos de desmoralización fallidos, puesto que luchan a la desesperada.
El Bando de los Enanos del Caos
Estaría formado por dos jugadores Dawi-Zharrs que representarían a las tropas de la propia ciudad reclutadas para defenderla. Tendríamos cada uno (Marc y yo) un ejército de 2000 puntos cada uno. En este ejército no podría haber ni esclavos pielesverdes, ni hobgoblins de ningún tipo, ni máquinas de guerra (¡Están defendiendo la ciudad desde dentro… esto no se lo esperaban! *Y si metes estremecedores, al muro no llega ni Petete.
Pactamos que en cada bando solo podría haber un solo comandante, y un máximo de tres hechiceros, a repartir entre los dos jugadores. El comandante tenía que ser un Señor de la Torre en algún tipo de tauro, que aparecería por el lado del defensor a partir del turno 2 (el Comandante de la ciudad acude a poner orden)
Y, como no, hay un tercer ejército… ¡Los hobgoblins! Joan acudiría (esperemos XD) en nuestra ayuda en el turno 3, con un ejército de 2000 puntos de la lista de aliados hobgoblin (que tiene solo jefes hobgoblins, guerreros hobgoblins -con opción a arco-, jinetes de lobo, hobgoblins escurridizos, y gigantes de asedio como singulares). Hasta entonces, tendríamos que aguantar solitos.
El Bando de los Pielesverdes
Este sí que era el “bando del caos” xD Nada menos que 5 jugadores (Los dos Víctors, Emili, Xavi y Pol), con 1200 puntos de pielesverdes cada uno (6000 en total).
Aquí también, solo habría un único comandante pielverde (un Kaudillo Orco Negro) y un máximo de tres chamanes, a repartir entre todos.
Esta lista quedaba más limitada, que al fin y al cabo son esclavos fugándose: solo podría haber pielesverdes “normales” o grandotez a pie (nada de kóbolds o pastores de garrapatos), sin fanáticos, ni caballería, carros, etc. Si que podrían incluir trolls y gigantes (mano de obra enana del caos), así como, lógicamente, orcos negros (que en vez de 0-1 podrían ser, como máximo, un 50% de unidades del ejército). Originalmente no había goblins nocturnos en la batalla, pero al fallar un jugador la semana antes, Pol se ofreció a substituirle, con su ejército de nocturnos, así que abrimos la opción (eso sí, sin fanáticos ni garrapatos).
Adicionalmente, cada unidad de orcos podría, si quisiera, cambiar el campeón de la unidad por un gran jefe orco negro pagando los puntos correspondientes (que podría equiparse con objetos mágicos, etc), y que no contaría como héroe.
Estas eran las reglas oficiales… pero, por alguna razón, los pielesverdes decidieron también internamente que equiparían a cada personaje/unidad con, como mucho, un objeto mágico por cabeza, ya que no han tenido tiempo de hacer un buen saqueo…Cosas random de pielesverdes XD
Las listas… Enanos del Caos
En mi caso, tuve el honor de llevar al Señor de la Torre, en un “Gran pequeño Tauro” (se llama gran Tauro, pero es el pequeño de los tres en las propuestas, así que lo he bautizado así), con arma a dos manos, y armadura de Gazrakh (de 1+)
Tenía un Jefe Centauro, que aproveché para pintar, y al cual le puse el guantelete de Bazzrac el cruel (para pasar a tener F5), armadura de 4+, y arma adicional (al final, me sobraban algunos puntos y le acabé poniendo escudo y arma a dos manos, para que hiciera de navaja suiza si hacía falta)
Y como tercer personaje, un brujo de nivel 2 con saber de la muerte, con un pergamino, y el Cáliz de la Oscuridad (para restar 1d3 dados de dispersión del adversario -y de energía nuestros, y asegurarnos que entraran los hechizos que quisiéramos)
En cuanto a tropas, tiré por lo que tenía, y que habréis podido ver en la escalada de enero: 20 guerreros enanos del caos con escudo y grupo de mando completo, 10 ballesteros con músico recién pintados, y 15 trabuqueros horribles de Mantic que tengo que repintar (o quemar XD) algún día -sin hobgoblins cuesta llegar al mínimo de básicas-
20 Berserkers enanos del caos serían mi infantería de élite (furia asesina para defender huecos de muralla no es la mejor de las ideas, pero tenía ganas de lanzarlos a trinchar orcos y estrenarlos), así como 9 Centauros menores, con estandarte de la templanza (para tener armadura de 3+) y arma a dos manos, para ir con el jefe centauro a cazar orcos, y 3 centauros mayores con dos armas de mano y armadura ligera.
Las tropas de Marc: eligió un Castellano (héroe enano a pie) con arma a dos manos, guja, y máscara de los hornos, y los dos magos que faltaban: un herrero demoníaco -nivel 2- con armadura de Gazrach y guja, y un brujo de Hashut… con frasco demoníaco. Este objeto obliga a hacer un chequeo de pánico a las unidades a 45cm una vez por partida, y podía ser muy determinante para bloquear una zona entera de pielesverdes.
En cuanto a tropas, aprovechó a poner más números sobre la mesa: una unidad de 19 Guerreros E.C, dos unidades de 12 trabuqueros, y una de 10 ballesteros. Además, una unidad de 10 Guerreros con arma a dos manos ocuparía uno de los edificios.
Y de especiales y singulares… 8 Gujas ocuparían el segundo edificio (la armería, que pensamos que dejarían atrás al ser menos relevante, y podrían ir disparando desde ahí). Además, tenía un sólido bloque de 18 Guardias Infernales, tozudos y cubiertos de armadura, con estandarte de guerra, para que nadie pasara por ahí, y 4 Centauros mayores con el mismo equipo que los míos.
Y los Hobgoblins de Joan: costó llegar a los 2000 puntos, y tuvimos que juntar los hobgoblins de todos XD había tres héroes: un kaudillo a pie, uno en lobo, y un tercero -también en lobo- porta de batalla.
Caballería: dos unidades grandes de 10 jinetes de las estepas con escudo (una llevaría a los dos personajes montados), y dos pequeñas de 5 (las cuatro, con lanza y arco y músico…había que llegar a los 2000 puntos)
Infanería: dos unidades de 25 hobgoblins con escudo y grupo de mando, y dos de arqueros -una de 10 y otra de 20-, junto con una unidad de 20 hobgoblins escurridizos.
Y, como singulares, la casa por la ventana… dos gigantes de asedio, muajaja.
Las listas… De los pielesverdes
No tengo las listas de los pielesverdes, pero, como veréis en las fotos, casi que es mejor así, ya que nos llevaría un rato bien largo. 6000 puntos de orcos y goblins de infantería (con algunos trolls y gigantes), con un solo comandante y un máximo de 3 hechiceros… son un porrón de pielesverdes XD
Algunos jugadores optaron por llevar solo orcos y orcos negros, otros mezclaron con goblins o goblins nocturnos…
Total, que salieron: una unidad de 2 trolls redirectoras, tres gigantes, dos unidades de snotlings, cuatro de arqueros (dos de goblins nocturnos y dos de orcos)…y 20 peñas de pielesverdes. Pum. Sobre la mesa daban un miedo tremendo, apiladas en dos líneas de batalla y ocupando toda la mesa. Glupps…
¡Entre ellas, había nada más y nada menos que 7 unidades de orcos negros, dispuestas a llevarse lo que hiciera falta por delante para escapar!
Como las unidades podían llevar héroes orcos negros dentro en lugar de campeones, había muchos de ellos entremezclados, para que estos no sufrieran tanto de animosidad.
LA PARTIDA
El recibimiento en casa de los Llinàs marcó el tono de la partida, uno hermano con disfraz de hobgoblin, y el otro de Enano del Caos (Con yelmo de Caballero Negro de Monthy Pytons y de rodillas), y al entrar pudimos ver el enorme campo de batalla que habían juntado, con la enorme muralla (sus dos portones y el hueco derruido en medio), los edificios, piedras y ruinas, y el río de magma en un rincón con puentes para atravesarlo. Los volcanes y nubes de humo traían luces led para dar más ambiente. ¡Una pasada poder jugar así!
Despliegue
En cuanto a hechizos, mi Brujo eligió el saber de la muerte, obteniendo el primer hechizo (1d6 de F4) y el de robo de vida (hacer una herida y ganarla… para rematar gigantes o algo).
El herrero obtuvo la bola de fuego (1d6 de F4) y la deflagración infernal (1d6 de F4, que puede seguir quemando sin fin hasta que el jugador defensor iguale o supere en una tirada de 1d6).
Y el segundo Brujo, se atrevió con el Saber de Hashut (a mi parecer, bastante malo para hechiceros de nivel 2, al ser los primeros hechizos muy situacionales… aunque mejora para el de nivel 4), y obtuvo el hechizo de Ceniza (que reduce el movimiento y capacidades de una unidad enemiga) y el de dar especial de 4+ a un personaje.
Por parte de los pielesverdes, todos ellos cogieron la Mirada de Morko (1d6 de F4). Como segundo hechizo, un chamán obtuvo el explotacerebros (2d6 de F4), y el otro la Mano de Morko (Mover 5d6cm una unidad hacia el enemigo)
Decidimos que los jugadores pielesverdes desplegarían una unidad por cabeza, y entonces nosotros desplegaríamos una única unidad. Aun así, acabamos más o menos a la par (los pielesverdes empezaban primero al ser los que intentan huir).
Por nuestra parte, tuvimos un poco de sentido común en cuanto a la jugabilidad al repartirnos la mesa: yo me quedé el flanco derecho, Marc el izquierdo y los edificios, y el centro nos lo repartimos… de manera que podríamos jugar nuestros turnos ágilmente y sin pisarnos, teniendo que coordinarnos únicamente en que hacer en el centro.
En el flanco izquierdo Marc puso una unidad de guerreros enanos en el portón, 10 ballesteros, 12 trabuqueros con el hechicero del Frasco de Ashrak, y los 4 centauros mayores. En el edificio (los corrales) puso a 10 enanos con arma a dos manos.
Frente a ellos, había dos peñas de 20 orcos negros, una de orcos -o grandotez-, una de goblins nocturnos, y unos snotlings, liderados por un chamán orco y un gran jefe en la unidad de orcos -creo-
Este flanco tenía la peculiaridad de incluir en un lateral las mazmorras, así que en cualquier momento podría escapar el monstruo ahí encerrado, y actuar aleatoriamente (así que los pielesverdes tomaron la acertada precaución de colocar a unos snotlings en esa esquina, para evitar que el monstruo hiciera destrozos en sus filas)
En el centro, teníamos 60cm que cubrir, pero unas colinas impasables con cascada de lava lo dividían en dos, y hacían más fácil poder tapar huecos. Ahí pusimos la super-unidad de guardias infernales con dos personajes, y la mía de Berserkers, junto a la segunda unidad de trabuqueros de Marc, y mis centauros mayores (pusimos una unidad de trabuqueros en cada una de las tres zonas, algo apartados del hueco en sí, para que pudieran disparar un par de turnos por lo menos)
Por parte de los pielesverdes…había tropas por doquier. Seis grandes peñas de orcos incluyendo una de grandotez con el Kaudillo dentro, hacia la derecha, y tres peñas de orcos negros, que parecían imposibles de parar… junto a ellos, se mezclaba una unidad de goblins y otra de arqueros nocturnos, y, en última fila, en la retaguardia, una horda de 6 peanas de snotlings puestas en fila… preparada astutamente para frenar a los hobgoblins que pudieran aparecer en el tercer turno. Para rematar, dos trolls pululaban por ahí, para hacer de redirectoras o algo…
-Y en el flanco derecho, el que mis tropas debían proteger, puse, de forma parecida al flanco izquierdo, los 20 guerreros taponando las puertas, con trabuqueros y ballesteros a un lado -estos con un hechicero-, y la unidad grande de centauros menores con el personaje. En el edificio -la armería- se habían atrincherado 10 gujas de Marc para poder disparar varios turnos u obligar a los pielesverdes a perder tiempo ocupando el edificio.
Y por la parte pielverde… glupps. Aprovechando el puente en diagonal pusieron una unidad de 10 orcos negros a pelo y un gigante (para capturar armería y llenarse de armamento antes de ir a la puerta), y, en el centro, dos gigantes más (tres en total), dos peñas de orcos, unos arqueros orcos, una peña de goblins nocturnos, y más a la izquierda (de manera que podrían optar por dirigirse al centro o al portón de la derecha) otros arqueros orcos y unos arqueros goblins nocturnos, otra peña gigante de nocturnos, y una de orcos negros con un gran jefe… Uff… me entraron sudores.
El número de pielesverdes era apabullante… en aquel momento veía bastante imposible poder frenarlos. Especialmente en el flanco derecho, iba a haber un coladero de tropas.
No obstante, teníamos dos ventajas:
la primera, que no estábamos solos: en el turno dos entraría mi Gran Tauro (por el lado derecho, ahí necesitábamos ayuda cuanto antes), y en el tres, los hobgoblins… así que nuestro objetivo era únicamente aguantar lo suficiente para que estos pudieran cazar pielesverdes por la retaguardia.
La segunda ventaja… que los pielesverdes… no sé cómo desplegaron. Supongo que habría una coherencia interna de repartir orcos negros para disminuir animosidades, o de alternar goblins con orcos para no tener pánicos… pero mezclaron bastante al tuntún unidades de distintos generales, de manera que para que uno moviera, el otro tenía que apartarse y no disparar, o ponerse de acuerdo… y aquello se convertiría en una fuente de disputas y diversión que ríete de la regla animosidad XD
…Y hasta aquí por hoy. Veo que el artículo se va a alargar un montón, así que casi mejor dividirlo para no saturar al lector. Espero que os haya gustado esta primera parte, y os deje con ganas de más 😀
Genial artículo! Estas batallas están destinadas a olvidar cosas y cometer errores, jejeje. Pero no me queda más que felicitaros por el gran trabajo y amor al juego que percibe al leer el reportaje. Sois muy grandes, sobre todo Marc! 🤣🤣
¡Menuda currada! Mis felicitaciones.
Ya a título más personal, como jugador (o mejor dicho coleccionista, y a ratos pintor XD) enano ver cómo se dan de zurras es una victoria XD.
Me encanta, que batallón!!! Con mucha ganas de leer lo próximo. Tiene que ser increíbles las sensaciones que dejan este tipo de escenarios. Además pase lo que pase lo vas a disfrutan para contar la historia.
Esto se merecería que lo maquetaseis como un informe de White Dwarf!!! Deseando leer el informe, el previo ya deja muy buen sabor de boca. Gracias por compartir 😀
Me encanta el redactado de Enric, estuve en la batalla y me he quedado con ganas de saber lo que pasa! 🙂
Tremendo! Me voy directo a leer la segunda parte 😀